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Referencias Cruzadas
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Proverbios 16:6

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Hay perdón de pecados por medio del amor fiel y la lealtad; honrando al Señor serás librado del mal.

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27 Referencias Cruzadas  

“Pues yo dije para mí: ‘Nadie respeta a Dios en este lugar. Me matarán para quedarse con mi esposa,’” respondió Abraham.

Pero los gobernadores anteriores a mí habían impuesto una pesada carga al pueblo, quitándole cuarenta siclos de plata, así como comida y vino. Sus ayudantes también extorsionaban al pueblo. Pero por mi respeto a Dios no actué así.

“Lo que ustedes están haciendo no está bien”, les dije. “¿No creen que deberían respetar a nuestro Dios para que las naciones enemigas no nos critiquen?

Dijo a los hombres: ‘Reverenciar al Señor es la sabiduría, y apartarse del mal es el entendimiento’”.

El amor y la verdad se encontrarán; la bondad y la paz se besarán mutuamente.

Pero como las parteras respetaban a Dios, no hicieron lo que el rey de Egipto les había ordenado, sinoque dejaban vivir a los niños también.

Moisés les dijo: “No teman, porque Dios sólo ha venido a probarlos. Quiere que le tengan miedo para que no pequen”.

Los sabios son cuidadosos y evitan el mal, pero los necios andan confiados en su imprudencia.

Los que viven en rectitud respetan al Señor, pero los que viven con deshonestidad lo aborrecen.

Respetar al Señor es fuente de vida con la cual puedes evadir las trampas de la muerte.

El Señor aborrece al arrogante. De algo puedes estar seguro: los malvados no se quedarán sin castigo.

El amor fiel y la lealtad mantienen al rey a salvo. El amor fiel es el fundamento de su gobierno.

Aférrate a la bondad y a la verdad. Átalas a tu cuello y escríbelas en tu mente.

No te creas sabio, respeta a Dios y evita el mal.

Honrar al Señor significa aborrecer el mal. Por ello aborrezco el orgullo y la arrogancia, la conducta malvada y el decir mentiras.

“Esto es lo que significa, Su Majestad, y lo que el Altísimo ha decretado que le sucederá a mi señor el rey.

“Así que, Majestad, hazme caso. Deja de pecar y haz lo que es correcto. Acaba con tus iniquidades y sé misericordioso con los oprimidos. Tal vez entonces las cosas sigan yendo bien para ti”.

No se exploten los unos a los otros, sino respeten a Dios, porque yo soy el Señor su Dios.

Si, actuando desde su interior, realizan actos de bondad hacia otros, entonces todo estará limpio en ustedes.

Él corta de mí cada una de las ramas que no llevan fruto. Él poda las ramas que llevan fruto a fin de que lleven mucho más fruto.

Él no hace distinción entre nosotros y ellos, y limpió sus corazones cuando ellos creyeron en él.

Queridos amigos, dado que tenemos estas promesas, limpiémonos de todo lo que contamina nuestro cuerpo y espíritu, procurando la santidad que nace de la reverencia a Dios.

Cada uno de ustedes debe estar dispuesto a aceptar lo que los demás les dicen a partir de la reverencia por Cristo.

No está al otro lado del océano ni más allá del mar, así que tienes que preguntarte: “¿Quién va a cruzar el océano para traérnosla y hacernos saber lo que dice para que podamos obedecerla?”

Ahora que se han consagrado a seguir la verdad, ámense unos a otros con sinceridad, como una verdadera familia.




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