Las palabras de los justos son una Fuente de vida, pero las palabras de los necios esconden violencia en su carácter.
Los que viven en rectitud mirarán lo que está pasando y se alegrarán, pero los malvados serán silenciados.
Los que hacen el bien saben decir lo correcto, pero los malvados siempre mienten.
Los buenos son bendecidos, pero las palabras de los malvados esconden la violencia de su carácter.
La enseñanza del sabio es como una fuente de vida, gracias a la cual puedes evadir las trampas de la muerte.
Las palabras amables son Fuente de vida, pero el decir mentiras causa gran daño.
Los sabios comparten su conocimiento, pero los necios no piensan de esta mima manera.
Las palabras de las personas pueden ser profundas como las aguas; como una corriente que brota y es la fuente de la sabiduría.
Hay oro y muchas piedras preciosas. Pero hablar con sensatez es la joya más valiosa.
No usen lenguaje sucio. Digan palabras que animen a las personas cuando sea necesario, de tal modo que sean palabras de ayuda para quienes los escuchan.