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Referencias Cruzadas

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Mateo 6:13

Versión Biblia Libre

No dejes que seamos tentados a hacer el mal, y sálvanos del Maligno.

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57 Referencias Cruzadas  

Algún tiempo después, Dios puso a prueba a Abraham. Y lo llamó: “¡Abraham!” “Aquí estoy”, respondió Abraham.

“¡Amén!”, respondió Benaía, hijo de Joyadá. “¡Que el Señor Dios de mi señor el rey lo confirme!

¡Qué maravilloso es el Señor, el Dios de Israel, que vive por los siglos de los siglos! Entonces todo el pueblo dijo: “¡Amén!” y “¡Alaben al Señor!”.

Señor, tuyos son la grandeza, el poder, la gloria, el esplendor y la majestad, porque todo lo que hay en el cielo y en la tierra es tuyo. Señor, tuyo es el reino, y eres admirado como gobernante de todo.

Jabes suplicó al Dios de Israel: “¡Por favor, bendíceme y amplía mis fronteras! Acompáñame y mantenme a salvo de cualquier daño para que no tenga dolor”. Y Dios le dio lo que pidió.

¡Señor, tu eres Rey por siempre y para siempre! Las naciones desaparecerán de sus tierras.

¡Cuán grande es el Señor, el Dios de Israel, quien vive por siempre y para siempre! ¡Todo el mundo diga “Amén”! ¡Alaben al Señor!

Porque el poder real le pertenece al Señor; Es el único que gobierna sobre las naciones.

Alaben al Señor, el Dios de Israel, ¡Por los siglos de los siglos! ¡Amén y amén!

Porque nuestro Señor Altísimo es imponente; él es el gran rey de toda la tierra.

¡Porque el Señor es el Rey de toda la tierra; canten alabanzas con Salmos!

¡Alaben su maravilloso nombre para siempre! ¡Que todo el mundo sea lleno de su gloria! ¡Amén y amén!

Que el señor sea bendito por siempre. Amén y amén.

¡El Señor reinará por siempre y para siempre!

No dejes que sea falso, ayúdame a no decir mentoras. No me hagas pobre ni rico; solo dame la comida que necesito.

Te liberaré del poder de los malvados y te libraré de las garras de los crueles.

“¡Amén!”, dijo Jeremías. “¡Deseo que el Señor haga precisamente eso! Ojalá el Señor cumpliera tus palabras proféticas y trajera de vuelta a Jerusalén los objetos del Templo y a todos los exiliados de Babilonia.

Serás expulsado de la sociedad humana y vivirás con los animales salvajes. Comerás hierba como el ganado, y te empaparás del rocío del cielo. Así estarás durante siete veces hasta que reconozcas que el Altísimo gobierna los reinos humanos y que se los da a quienes él escoge.

Pero los consagrados al Altísimo recibirán finalmente el reino. Ellos poseerán el reino para siempre, por los siglos de los siglos”.

Que esta agua que maldice entre en tu estómago y haga que tu vientre se hinche y tus muslos se encojan. “La mujer debe responder: ‘De acuerdo, estoy de acuerdo’.

Estén despiertos y oren, para que no caigan en tentación. Sí, el espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil”.

Enséñenles a seguir todos los mandamientos que yo les he dado a ustedes. Recuerden, yo estoy siempre con ustedes hasta el fin del mundo”.

Solamente digan sí o no; cualquier cosa aparte de esto viene del Maligno.

Venga tu reino. Que tu voluntad sea hecha en la tierra como se hace en el cielo.

No te estoy pidiendo que los quites del mundo, sino que los protejas del maligno.

No experimentarán ninguna tentación más grande que la de ningún otro, y Dios es fiel. Él no permitirá que sean tentados más allá de lo que pueden soportar. Y cuando sean tentados, él les proporcionará una salida, a fin de que puedan mantenerse fuertes.

Pues si ustedes solo oran “en el Espíritu”, ¿Cómo podrán decir “amén” las personas comunes, después de tu oración de agradecimiento, si no entendieron lo que dijiste?

No importa cuántas promesas Dios haya hecho, en Cristo la respuesta siempre es Sí. Por él, respondemos diciendo Sí a la gloria de Dios.

Jesús se entregó a sí mismo por nuestros pecados para liberarnos de este mundo actual de maldad, siguiendo la voluntad de nuestro Dios y Padre.

Te alimentó en el desierto con maná que tus antepasados nunca habían conocido, humillándote y poniéndote a prueba, para que al final te fuera bien en el futuro.

Recuerda cómo durante estos cuarenta años el Señor tu Dios te ha llevado por todo el desierto, humillándote y poniéndote a prueba para saber en qué estabas pensando realmente, y si ibas a cumplir sus mandamientos o no.

mientras aguardan la venida de su Hijo, Jesús, al que Dios levantó de los muertos, y quien nos salvará del juicio que está por venir.

Pero el Señor es fiel y los fortalecerá, y también los protegerá del maligno.

La honra y la gloria sean por siempre y para siempre para el Rey eterno, el inmortal, invisible y único Dios. Amén.

E incluso otros recibieron insultos y latigazos; y fueron encadenados y encarcelados.

Sean responsables, y estén vigilantes. El diablo, su enemigo, anda por ahí, como león rugiente, buscando a quién devorar.

Como pueden ver, el Señor puede rescatar de las dificultades a quienes lo respetan, y puede mantener a los malvados hasta el día del juicio, cuando complete su castigo.

Los que pecan son del diablo, porque el diablo ha estado pecando desde el principio. Por eso vino el Hijo de Dios, para destruir lo que el diablo ha hecho.

Soy el que vive. Estuve muerto, pero mírame, ahora estoy vivo por siempre y para siempre, y tengo las llaves de la muerte y del sepulcro.

Después de esto escuché lo que sonaba como el ruido de una gran multitud en el cielo, que gritaba: “¡Aleluya! Salvación, gloria y poder describen a nuestro Dios,

Entonces los veinticuatro ancianos y las cuatro criaturas vivientes cayeron postrados y adoraron a Dios, que está sentado en el trono. “¡Amén! ¡Aleluya!” gritaban.

No tengas miedo respecto a las cosas que vas a sufrir. Sí, el diablo llevará a muchos de ustedes a la cárcel, y sufrirán persecución durante diez días. Solo mantente fiel, incluso si esto implica la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

El enjugará toda lágrima de sus ojos, y la muerte no volverá a ocurrir. Y nunca más habrá lamento, llanto, o dolor, porque el mundo anterior ya nunca más existirá”.

Y como has perseverado como te lo dije, cuidaré de ti durante el juicio que viene sobre el mundo, cuando todos los habitantes de la tierra serán juzgados.

“Escribe esto al ángel de la iglesia de Laodicea: Esto es lo que dice el Amén, el testigo fiel, el máximo gobernante de la creación de Dios:

Entonces oí a cada criatura en el cielo, en la tierra y debajo de la tierra, y en el mar—todas las criaturas, en todas partes—respondían: “Bendito Aquél que está sentado en el trono, y el Cordero, a ellos sea la honra, la gloria y la autoridad, por siempre y para siempre”.




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