Cuando descendieron de la montaña, Jesús les dio instrucciones precisas: “No le digan a nadie lo que vieron hasta que el Hijo del hombre se haya levantado de entre los muertos”, les dijo.
pero déjenme decirles que Elías ya vino y sin embargo la gente no reconoció quién era él. Hicieron con él todo lo que quisieron. De la misma manera, el Hijo del hombre también sufrirá en manos de ellos”.
hol“Porque ustedes no creen lo suficiente”, les dijo Jesús. “Les digo que aún si la confianza de ustedes fuera tan pequeña como una semilla de mostaza, ustedes podrían decir a esta montaña ‘muévete de aquí para allá,’ y esta se movería. Nada sería imposible para ustedes”.