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Referencias Cruzadas

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Marcos 2:20

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Pero viene el día en que el novio será arrebatado de en medio de ellos, y entonces ellos ayunarán.

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29 Referencias Cruzadas  

Que el rey te desea por tu hermosura; respétalo, porque él es tu Señor.

salgan! ¡Miren, mujeres de Sión! Vean al rey Salomón llevando la corona que su madre le puso en la cabeza el día de su boda, su día más feliz.

Porque tu Hacedor es tu esposo, el Señor Todopoderoso es su nombre el Santo de Israel es tu Redentor, se llama el Dios de toda la tierra.

Porque como un joven se casa con una joven, así se casarán tus hijos contigo; y como un novio es feliz con su novia, así tu Dios será feliz contigo.

¡Levántate, espada mía! ¡Ataca a mi pastor, al hombre que ha estado junto a mi! declara el Señor. Golpea al pastor y las ovejas serán dispersas, y yo levantaré mi mano contra los corderos.

“Todos ustedes me abandonarán esta noche”, les dijo Jesús. “Como dice la Escritura: ‘Yo golpearé al pastor, y el rebaño estará completamente disperso’.

“¿Acaso los invitados a la boda lloran cuando el novio está con ellos?” respondió Jesús. “Pero viene el tiempo cuando el novio ya no estará y entonces ayunarán.

“¿Acaso los invitados a una fiesta de bodas ayunan mientras el novio está con ellos?” preguntó Jesús. “No. Mientras el novio está con ellos, ellos no pueden ayunar.

Nadie coloca un parche nuevo en ropas viejas. De lo contrario el parche nuevo se encogería y se despegaría de la ropa vieja y la rasgadura sería peor.

Entonces Jesús dijo a sus discípulos: “Viene el tiempo cuando ustedes anhelarán ver el día en que venga el Hijo del hombre, pero no lo verán.

“No, pero viene el tiempo cuando el novio será quitado de en medio de ellos. Entonces ellos ayunarán”.

Ustedes siempre tendrán a los pobres aquí con ustedes, pero no siempre me tendrán a mí aquí”.

Mis hijos, yo estaré con ustedes solo un poco más. Me buscarán, pero les digo lo mismo que le dije a los judíos: adonde yo voy, ustedes no pueden ir.

Yo dejé al Padre y vine al mundo; ahora dejo el mundo y regreso a mi Padre”.

“Pero les digo la verdad: es mejor para ustedes que yo me vaya, porque si no me voy, el Consolador no vendría a ustedes. Si yo me voy, lo enviaré a ustedes.

“Dejo el mundo, pero ellos seguirán en el mundo mientras yo regreso a ti. Padre Santo, protégelos en tu nombre, el nombre que me diste a mí, para que ellos sean uno, así como nosotros somos uno.

“Ahora vuelvo a ti y digo estas cosas mientras estoy aún en el mundo para que ellos puedan compartir completamente mi alegría.

¡El novio es quien se casa con la novia! El padrino espera y escucha al novio, y se alegra cuando escucha la voz de alegría del novio, así que ahora mi felicidad está completa.

Y después que les dijo esto, fue alzado mientras ellos lo veían y una nube lo ocultó de la vista de ellos.

Después de haber escogido ancianos para cada iglesia, y de haber orado y ayunado con ellos, Pablo y Bernabé los encomendaron al Señor, Aquél en quien creían.

Porque él debe permanecer en el cielo hasta el momento en que todo sea restaurado, como Dios lo anunció a través de sus santos profetas hace mucho tiempo.

De manera que no se priven el uno del otro, excepto por mutuo acuerdo, por un tiempo, por ejemplo, si quieren dedicar un tiempo a la oración. Después, vuelvan a estar juntos para que Satanás no los tiente a pecar por causa de su falta de dominio propio.

Sufro de una agonía por el celo divino que siento por ustedes, pues les prometí un solo esposo—Cristo—a fin de presentarlos a ustedes como una mujer virgen y pura para él.

He enfrentado trabajo duro y luchas, muchas noches sin dormir, hambre y sed, a menudo he estado sin comida, con frío, y sin ropa para cubrirme del frío.

Hemos sido azotados, llevados a la cárcel y atacados por turbas. Nos han hecho trabajar hasta el cansancio, soportando noches sin dormir y con hambre.

Celebremos y alegrémonos y démosle gloria, porque el día de la boda del Cordero ha llegado, y su novia se ha preparado”.

Uno de los siete ángeles que tenía las siete copas con las siete plagas, vino y me habló. Me dijo: “Ven conmigo. Te mostraré a la novia, a la esposa del Cordero”.




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