Puso el turbante en la cabeza de Aarón y colocó la placa de oro, la corona sagrada, en la parte delantera del turbante, como el Señor le había ordenado.
Estas son las ropas que deben hacer: un pectoral, un efod, una túnica, una túnica plisada, un turbante y una faja. Estos son los vestidos sagrados que harán para tu hermano Aarón y sus hijos para que puedan servirme como sacerdote.
Lavó las entrañas y las piernas con agua y quemó todo el carnero en el altar como una ofrenda quemada, una ofrenda de comida para ser aceptada por el Señor, como el Señor le había ordenado a Moisés.
Entonces yo dije: “Pongan un turbante limpio sobre su cabeza”. Y pusieron un turbante limpio en su cabeza, y ropas, mientras el ángel del Señor permanecía en pie allí.