“Así que pienso construir un Templo para honrar al Señor, mi Dios, como el Señor le dijo a mi padre David. Le dijo: ‘Tu hijo, al que pondré en tu trono para que te suceda, construirá el Templo para honrarme’.
El mensaje constante ha sido: Dejen sus malos caminos y las cosas malas que están haciendo para que puedan vivir en el país que el Señor les ha dado a ustedes y a sus antepasados para siempre.
“¡Haz lo que te digo! No hagas que diferentes tipos de ganado se reproduzcan juntos. No siembren sus campos con dos tipos diferentes de semillas. No uses ropa confeccionada con dos materiales distintos.
Después de que crucen el Jordán y se establezcan en el país que el Señor su Dios les está dando como posesión, y los deje descansar de la lucha contra todos sus enemigos y vivan seguros,
A Benjamín le dijo: “Que el que ama el Señor se mantenga seguro y a salvo en el Señor. El Señor siempre lo protege, dejándolo descansar sobre sus hombros”.