Juan 8:33

Versión Biblia Libre

“¡Nosotros somos descendientes de Abraham! Nosotros nunca hemos sido esclavos de nadie”, respondieron ellos. “¿Cómo puedes decir que seremos libres?”

Referencias Cruzadas

Génesis 15:13

Entonces el Señor le explicó a Abrán: “Puedes estar seguro de que tus descendientes serán extranjeros en otras naciones, donde sufrirán esclavitud y maltratados por 400 años.

Esdras 9:9

Aunque somos esclavos, nuestro Dios no nos ha abandonado en nuestra esclavitud, sino que nos ha mostrado su amor confiable al hacer que los reyes de Persia sean bondadosos con nosotros, al revivirnos para que podamos reconstruir el Templo de nuestro Dios y reparar su estado ruinoso, y al darnos un muro de protección alrededor de Judá y Jerusalén.

Levítico 25:42

Los israelitas no deben ser vendidos como esclavos porque me pertenecen como mis esclavos - los saqué de Egipto.

Mateo 3:9

y no se jacten de decirse a ustedes mismos: ‘Abrahán es nuestro padre’. Les digo que Dios podría convertir estas piedras en hijos de Abrahán.

Lucas 3:8

“¡Demuestren que están realmente arrepentidos! No traten de justificarse diciendo: ‘Somos los descendientes de Abrahán’. Les digo que Dios puede crear hijos de Abrahán a partir de estas piedras.

Juan 19:25

Y así lo hicieron. Junto a la cruz estaba la madre de Jesús, la hermana de su madre, María la esposa de Cleofás y María Magdalena.

Juan 8:37

Yo sé que ustedes son descendientes de Abraham. Sin embargo, ustedes están tratando de matarme porque se niegan a aceptar mis palabras.

Juan 8:39

“Nuestro padre es Abraham”, respondieron ellos. “Si ustedes realmente fueran hijos de Abraham, harían lo que Abraham hizo”, les dijo Jesús.

Juan 8:43

¿Por qué no pueden entender lo que estoy diciendo? ¡Es porque ustedes se niegan a escuchar mi mensaje!

Romanos 9:7

y no todos los que son descendientes de Abraham son sus verdaderos hijos. Pues la Escritura dice: “Tus descendientes serán contados por medio de Isaac”,

Jueces 2:18

Cuando el Señor proveyó a Israel de jueces, estuvo con cada juez y salvó al pueblo de sus enemigos durante la vida de ese juez, porque el Señor se compadecía de su pueblo, que gemía bajo sus opresores y perseguidores.

Jueces 3:8

El Señor se enojó con Israel, y los vendió a Cusán-Risatayín, rey de Aram Najarayín. Los israelitas estuvieron sometidos a Cusán-Risatayín durante ocho años.

Jueces 4:3

Los israelitas clamaron al Señor para que los ayudara, porque Sísara tenía novecientos carros de hierro y los maltrató cruelmente durante veinte años.