“Sin embargo, en cuanto tuvieron paz, volvieron a hacer el mal ante tus ojos. Así que una vez más los entregaste a sus enemigos, que los dominaron. Volvieron a ti, y te gritaron de nuevo. “Pero tú oíste desde el cielo una vez más, y los salvaste una y otra vez porque eres muy misericordioso.
El sacerdote lo inspeccionará, y si parece ser más que algo en la superficie, y si el pelo allí se ha vuelto blanco, el sacerdote lo declarará impuro. Es una enfermedad grave de la piel que ha infectado el furúnculo.
Sila ofrecen con espíritu de agradecimiento, entonces junto con el sacrificio de acción de gracias, deben ofrecer pan, obleas y pasteles bien amasados de la mejor harina, todo ello hecho sin levadura y mezclado o cubierto con aceite de oliva.
Entonces va y trae consigo otros siete espíritus mucho peores que él, y entra y vive allí. De modo que entonces la persona termina siendo peor de lo que era al comienzo. Así sucederá con esta generación malvada”.
Un hombre que estaba allí, había estado enfermo durante treinta y ocho años. Jesús lo miró, sabiendo que había estado allí por mucho tiempo, y le preguntó:
En el pasado vivieron mucho tiempo siguiendo los caminos del mundo: inmoralidad, complacencia sexual, orgías, fiestas, borracheras, e idolatría abominable.