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Referencias Cruzadas
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Josué 22:15

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Cuando llegaron, les dijeron a las tribus de Rubén y Gad, y a la media tribu de Manasés:

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31 Referencias Cruzadas  

Pero Joab respondió: “Que el Señor multiplique su pueblo cien veces. Su Majestad, ¿no son todos sus súbditos? ¿Por qué quieres hacer esto? ¿Por qué culparás a Israel?”

Como resultado, Israel se ha rebelado contra la casa de David hasta el día de hoy.

Después de que Amasías renunció a seguir al Señor, se tramó un complot contra él en Jerusalén, y huyó a Laquis. Pero los conspiradores enviaron hombres a Laquis para perseguirlo, y allí lo mataron.

Se enfrentaron a él y le dijeron: “No es tu lugar quemar incienso al Señor. Sólo los sacerdotes, los descendientes de Aarón, que han sido apartados como santos, pueden quemar incienso. Sal del santuario, porque has pecado, y el Señor Dios no te bendecirá”.

“¡No traigan a esos prisioneros aquí!”, les dijeron. “Si lo hacen, no lograrán más que aumentar nuestros pecados y nuestra maldad contra el Señor. Nuestra culpa ya es grande, y su feroz ira está cayendo sobre Israel”.

Señor, Dios de Israel, tú procedes con justicia. Hoy somos todo lo que queda, un remanente. Estamos ante ti con nuestra culpa, y por su causa nadie puede permanecer ante ti”.

Algunos israelitas incluso se han casado con mujeres de estos pueblos, tanto ellos como sus hijos, mezclando la raza santa con estos pueblos de la tierra. Nuestros líderes y funcionarios están al frente de este comportamiento pecaminoso”.

Para que no fueran como sus antepasados, una generación terca y rebelde que carecía de fe y fidelidad.

Han abandonado rápidamente el camino que les ordené seguir. Se han hecho un ídolo de metal con forma de becerro, inclinándose ante él en adoración y ofreciéndole sacrificios. Dicen: ‘Estos son los dioses que los sacaron de la tierra de Egipto’”.

Pero ellos se rebelaron contra él y causaron dolor a su Espíritu Santo, por lo que para ellos se convirtió en un enemigo y luchó contra ellos.

“Necesitan confesar sus pecados y los de sus padres, actuando de manera tan infiel hacia mí, oponiéndose a mí.

Es una ofrenda de culpa porque fuiste culpable en lo que concierne al Señor”.

Los amalecitas y cananeos que viven allí los atacarán, y morirán por espada. Porque rechazaron al Señor, y no les ayudará”.

Si dejas de seguirlo, él volverá a abandonar a esta gente en el desierto, y su muerte será culpa tuya!”

“Dile a los israelitas que cuando un hombre o una mujer es infiel al Señor pecando contra alguien más, son culpables

Si aun así él se niega a escucharte, entonces dilo a la iglesia. Si se niega a escuchar a la iglesia, entonces trátalo como a un extranjero y recaudador de impuestos.

Hermanos y hermanas, les ruego en el nombre de nuestro Señor Jesucristo que estén en armonía y no divididos. Por el contrario, desarrollen una conducta y propósito de estar unidos.

Cuando se reúnan en el nombre del Señor Jesús, estaré allí con ustedes en espíritu y con el poder de nuestro Señor Jesús.

Si no haces caso de esto y te niegas a escuchar, si te sientes atraído a inclinarte ante otros dioses y adorarlos,

porque alejarán a tus hijos de mi, para que vayan a adorar a otros dioses. Entonces el Señor se enfadará contigo y vendrá rápidamente a matarte.

¡Asegúrense de no rechazar al que les está hablando! Si ellos no pudieron escapar cuando rechazaron a Dios en la tierra, sin duda alguna nosotros tampoco podremos escapar si volvemos nuestra espalda a Dios, quien nos advierte desde el cielo.

Los israelitas se reunieron en Silo para ir a la guerra contra ellos.

Con él iban diez jefes, uno de cada una de las diez tribus de Israel, y cada uno el jefe de su familia.

“Esto es lo que dice todo el pueblo del Señor: ‘¿Qué acto desleal es este que han cometido contra el Dios de Israel al construiros un altar? ¿Cómo pudieron apartarse de él ahora con tanta rebeldía?

Entonces, ¿por qué se alejan ahora del Señor? Si hoy se rebelan contra el Señor, mañana se enfadará con todos nosotros.

La rebelión es tan mala como la brujería, y la arrogancia es tan mala como el pecado de la idolatría. Porque has rechazado los mandatos del Señor, él te ha rechazado como rey”.




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