(Otra esposa que vino de Judá fue la madre de Jered el padre de Gedor, Heber el padre de Soco, y Jecuthiel el padre de Zanoa.) Estos eran Los hijos de Bitia, la hija del Faraón, con quien Mered se había casado.
El Señor hizo entrar en pánico a los ejércitos amorreos cuando vieron a los israelitas. Los abatió con un gran golpe en Gabaón; los persiguió hasta Bet-horón, y los redujo en el camino hacia Azeca y Maceda.
Así que Adoni-zedek, rey de Jerusalén, envió un mensaje a Hoham, rey de Hebrón, a Piram, rey de Jarmut, a Jafía, rey de Laquis, y a Debir, rey de Eglón, diciendo:
Después David escapó y se fue a la cueva de Adulam. Cuando se enteraron de dónde estaba, sus hermanos y todo el resto de su familia fueron y se reunieron con él allí.