Jeremías 36:23

Versión Biblia Libre

Cada vez que Jehudí terminaba de leer tres o cuatro columnas, Joaquín las cortaba con un cuchillo de escriba y las arrojaba al fuego. Finalmente, todo el pergamino se quemó por completo.

Referencias Cruzadas

1 Reyes 22:27

Diles que estas son las instrucciones del rey: ‘Pongan a este hombre en la cárcel. Denle sólo pan y agua hasta mi regreso seguro’”.

1 Reyes 22:8

“Sí, hay otro hombre que podría consultar al Señor”, respondió el rey de Israel, “pero no me gusta porque nunca profetiza nada bueno para mí, ¡siempre es malo! Se llama Micaías, hijo de Imá”. “No deberías hablar así”, dijo Josafat.

Salmos 50:17

Odias mi disciplina, y desechas mis palabras.

Proverbios 1:30

Ellos no están dispuestos a aceptar mi consejo, y aborrecen mis advertencias.

Proverbios 13:13

Si rechazas las palabras de consejo, pagaras por ello; pero si respetas el consejo que te dan, serás recompensado.

Proverbios 19:21

Los seres humanos hacen planes en sus mentes, pero la decisión final es del Señor.

Proverbios 21:30

Toda la sabiduría, entendimiento e instrucción que puedas lograr no son nada delante del Señor.

Proverbios 29:1

Cualquiera que siga rechazando obstinadamente muchas advertencias, sufrirá destrucción repentina, sin ningún remedio.

Proverbios 5:12

Y dirás: “Oh, cómo aborrecía la disciplina, y mi mente aborrecía la corrección!

Jeremías 36:2

Toma un rollo y escribe todo lo que te he dicho condenando a Israel, a Judá y a todas las demás naciones, desde que te hablé por primera vez durante el reinado de Josías hasta ahora.

Jeremías 36:27

Después de que el rey quemó el pergamino que Jeremías había dictado a Baruc, llegó a Jeremías un mensaje del Señor:

Jeremías 36:28

Consigue otro pergamino y escribe todo lo que había en el primer pergamino que quemó Joacim, rey de Judá.

Apocalipsis 22:19

Si alguno quita las palabras proféticas de este libro, Dios le quitará su parte en el árbol de la vida y de la ciudad santa que se describe en este libro.