Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas
- Anuncios -




Jeremías 25:30

Versión Biblia Libre

Da todo este mensaje como una profecía contra ellos. Diles: El Señor tronará desde lo alto. Tronará con fuerza desde el lugar santo donde vive. Dará un gran rugido contra los rediles. Dará un fuerte grito como de gente que pisa las uvas, asustando a todos los que viven en la tierra.

Ver Capítulo Copiar

25 Referencias Cruzadas  

Entonces el rey le dijo a Sadoc: “Lleva el Arca de Dios de vuelta a la ciudad. Si el Señor me aprueba, me hará volver y me dejará ver de nuevo el Arca y su Tienda.

Y el Señor le dijo: “He escuchado tu oración y tu petición a mí. He dedicado este Templo que has construido poniendo mi nombre en él para siempre; siempre velaré por él y lo cuidaré.

Los sacerdotes y los levitas se levantaron para bendecir al pueblo, y Dios los escuchó: su oración ascendió hasta donde él vivía en el cielo.

El Señor está en su Templo. El trono del Señor está en el cielo. Él mira con atención a cada uno, y los vigila con cuidado.

“Esta siempre será mi casa; aquí es donde he de morar.

Las naciones están en confusión, Los reinos colapsan. Dios levanta su voz y la tierra se estremece.

rehusándose a escuchar la voz de los encantadores y los hechiceros.

Entonces el Señor reaccionó como si hubiera despertado del sueño, como un guerrero que se despierta después de embriagarse con vino.

Por eso lloro con Jazer por las vides de Sibma; empapo con mis lágrimas a Hesbón y Eleale. Ya nadie grita en celebración por sus frutos de verano y su cosecha.

Cuando ruges, los pueblos huyen; cuando te preparas para la acción, las naciones se dispersan.

Como un poderoso guerrero marchará el Señor, como un soldado aguerrido sale con valor. Da su grito de guerra, gritando mientras lucha y derrota a sus enemigos.

Nuestro Templo es un trono de gloria, levantado en alto desde el principio.

El Señor ha salido de su guarida como un león, porque su país ha sido devastado por los ejércitos invasores, y a causa de la feroz ira del Señor.

Ya no hay fiesta ni alegría en los huertos y campos de Moab. He detenido el jugo de uva que fluye de los lagares. Nadie grita de alegría al pisar las uvas. No, sus gritos ahora no son de alegría.

El pueblo me segirá a mi, al Señor. El Señor rugirá como león y entonces sus hijos vendrán temblando desde el oeste.

Yo seré como un león con Efraín, y como un feroz león con el pueblo de Judá. Vendré y los desmenuzaré, los llevaré donde nadie podrá ir a rescatarlos.

El Señor rugirá desde Sión, alzando su voz desde Jerusalén, haciendo estremecer los cielos y la tierra. Pero el Señor resguardará a su pueblo, y protegerá al pueblo de Israel.

Y dijo: El Señor ruge desde Sión, y alza su voz desde Jerusalén. Los pastizales de los pastores se marchitan, y la cima del Monte Carmelo se seca.

El león ha rugido, ¿quién no temerá? El Señor ha hablado, ¿quién podrá negarse a hablar por él?

Callen ante el Señor, todos ustedes, porque él se ha levantado del lugar santo donde habita.

Por favor, mira desde tu casa en el cielo y bendice a tu pueblo, los israelitas, y el país que nos has dado, como prometiste a nuestros padres, una tierra que fluye leche y miel”.

De su boca salió una espada afilada para herir las naciones. Él gobernará el mundo con una vara de hierro, y él mismo pisotea el lagar del juicio de Dios, el Todopoderoso.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos