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Referencias Cruzadas

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Isaías 9:14

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Así que en un solo día el Señor le cortará a Israel la cabeza y la cola, las palma y los juncos.

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28 Referencias Cruzadas  

La luz de Israel se convertirá en un fuego, y su Santo se convertirá en una llama. Quemará sus espinas y zarzas en un solo día.

Nadie en Egipto puede hacer nada, sea quien sea: cabeza o cola, palmera o caña.

su castigo caerá repentinamente sobre ustedes, como un alto muro que sobresale y se derrumba en un instante.

Así que esto es lo que dice el Señor: Voy a poner bloques delante de esta gente para hacerla tropezar. Padres e hijos caerán muertos, amigos y vecinos también.

¿Se avergüenzan de las cosas repugnantes que hicieron? No, no se avergüenzan en absoluto, ni siquiera son capaces de sonrojarse. Por eso caerán como los demás, cuando los castigue; caerán muertos, dice el Señor.

El Señor mismo los ha dispersado y ya no cuida de ellos. Nadie respeta a los sacerdotes, y nadie admira a los líderes.

Entonces el Señor le dijo a Oseas: “Ponle por nombre Jezreel, porque yo castigaré la casa de Jehú por la sangre que derramó sobre Jezreel; y yo pondré fin al reino de Israel.

Gómer volvió a quedar embarazada y esta vez tuvo una hija. El Señor le dijo entonces a Oseas: “Ponle por nombre Lo-ruhama, porque no amaré más a la casa de Israel y de seguro no los perdonaré.

Entonces el Señor le dijo a Oseas: “Ponle por nombre Lo-ammi, porque ustedes ya no son mi pueblo y yo ya no soy su Dios.

Esto mismo te pasará a ti, Betel, por tu gran maldad. Al amanecer, el rey de Israel será destruido por completo.

Por ello, serán como la niebla de la mañana, como el rocío de la madrugada, como la paja de la era que se lleva el viento, como el humo de una chimenea.

Por ello ustedes tropezarán a plena luz del día, y el profeta tropezará igual que ustedes por la noche, y yo destruiré a la madre de todos ustedes.

Israel ha sido devorado. Entre las naciones son como cosa despreciable.

Esto es lo que dice el Señor: Como un pastor que trata de rescatar a una oveja de la boca de un león, pero solo salva un par de patas, o la punta de una oreja, así sucederá con el pueblo de Israel que habita en Samaria: Solo se “salvará” una esquina del sofá, o el trozo de la pata de una cama.

¡Tengan cuidado! Cuando el Señor de la orden, las grandes casas se reducirán a escombros, y las casas pequeñas quedarán en ruinas.

Pero esto es lo que el Señor dice: Tu esposa se convertirá en prostituta de la ciudad; tus hijos e hijas serán asesinados con espadas. Tu tierra será medida y dividida, y tú mismo morirás siendo extranjero tierra ajena. El pueblo de Israel será ciertamente exiliado de su tierra.

Permaneciendo a la distancia, con temor de sufrir la misma agonía que ella, dirán, “¡Desastre, desastre ha herido a Babilonia, la gran ciudad! ¡En solo una hora se ejecutó tu sentencia de muerte!”

¡En solo una hora toda esta riqueza ha quedado destruida!” Cada capitán de barco y todos los que viajan en el mar, así como todos los marineros y todos los que se ganan la vida trabajando en el mar, se quedaron en pie a la distancia.

Ahora por esto sus plagas caerán sobre ella en un solo día: muerte, lamento y hambre. El fuego la destruirá por completo, pues el Dios que la condena tiene gran poder”.




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