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Referencias Cruzadas

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Isaías 66:19

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Les daré una señal, y enviaré a las naciones a algunos que sobrevivan. Irán a Tarsis, a los libios y a los lidios (que son famosos como arqueros), a Tubal y a Grecia, y a las tierras lejanas que no han oído hablar de mí ni han visto mi gloria. Ellos anunciarán mi gloria entre las naciones.

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48 Referencias Cruzadas  

Misrayin fue el oadre de los ludeos, los anameos, los leabitas, los naftuitas

Los hijos de Jafet: Gomer, Magog, Madai, Jabán, Tubal, Mésec y Tirás.

Los hijos de Sem: Elam, Asur, Arfaxad, Lud, y Aram.

Los hijos de Jabán: Elisá, Tarsis, Quitín, y Rodanín.

Que Dios le de a Jafet mucho espacio para sus descendientes, y que vivan en paz con el pueblo de Sem, y que Canaán sea su esclavo también”.

Mizrayin fue el padre de los ludeos, anameos, leabitas, naftuitas,

Los hijos de Javán: Elisá, Tarsis, Quitín, Rodanín.

Anuncien sus actos gloriosos entre las naciones, las maravillas que hace entre todos los pueblos.

Los reyes de Tarsis y las islas le traerán tributos; y los reyes de Saba y Seba vendrán con regalos.

Levantará un estandarte para las naciones y reunirá al pueblo exiliado de Israel; reunirá al pueblo disperso de Judá desde los confines de la tierra.

Todos los pueblos del mundo, todos los que viven en la tierra, verán cuando se levante un estandarte en los montes, oirán cuando suene una trompeta.

En aquel tiempo se traerá al Señor Todopoderoso un regalo de un pueblo alto y de piel suave, de un pueblo temido por todos, de una nación muy poderosa de conquistadores, cuya tierra es arrastrada por los ríos. Será llevado al Monte Sión, el lugar identificado con el Señor Todopoderoso.

Aniquilará a todos los barcos comerciales de Tarsis, así como las embarcaciones comerciales.

Los que se han extraviado comprenderán sus errores; los que refunfuñan aprenderán a recibir instrucción.

Que glorifiquen al Señor y lo alaben en las islas.

No se dará por vencido ni se desanimará hasta que haya conseguido que la justicia se mantenga en todo el mundo. Incluso las tierras de ultramar esperarán sus enseñanzas.

Le diré al norte: ‘¡Entréguenlos!’ y al sur: ‘¡No los detengan!’ Hagan volver a mis hijos de lejos y a mis hijas de tierras lejanas.

Escúchenme, habitantes de las islas! ¡Presta atención, tú que vives lejos! El Señor me llamó antes de que naciera; me dio mi nombre cuando aún estaba en el vientre de mi madre.

¡Mira a esta gente que viene de lejos! Mira a esta gente que viene del norte, del oeste y del Alto Egipto.

Esto es lo que dice el Señor Dios: Mira cómo doy la señal a las naciones, cómo enarbolo mi bandera para que todos lo sepan. Los traerán de vuelta, llevando a tus hijos en sus brazos, y levantando a tus hijas sobre sus hombros.

Pronto llegará mi gobierno de justicia. Viene mi salvación. Mi poder traerá el juicio a las naciones. Las tierras lejanas me esperan a mí y a mi poder.

El Señor ha demostrado su santo poder a todas las naciones; el mundo entero verá la salvación de nuestro Dios.

Sorprenderá a muchas naciones, y los reyes callarán a causa de él, porque verán lo que no se les ha dicho, y entenderán lo que no habían oído.

Llamará a naciones que ni siquiera conoce, y las naciones que no lo conocen vendrán corriendo hacia él. Porque al Señor tu Dios, el Santo de Israel, lo hice glorioso.

Vienen de las islas que confían en mí, son barcos conducidos por los de Tarsis, que traen a tus hijos de lejos, trayendo consigo plata y oro. Vienen a honrar al Señor tu Dios, el Santo de Israel, porque él te ha hecho glorioso.

¡Salgan! ¡Salgan por las puertas! ¡Despejen el camino para el pueblo! ¡Construyan la carretera! ¡Desháganse de las piedras en el camino! Levanten una bandera para que las naciones puedan ver!

Me dejé consultar por gente que ni siquiera me hacía preguntas; me dejé encontrar por gente que ni siquiera me buscaba. A una nación que ni siquiera me reclamaba, le dije: ¡Aquí estoy, aquí estoy!.

¡Caballos, a la carga! ¡Carros, avancen como locos! Hagan avanzar a la infantería: soldados de Etiopía y de Put llevando sus escudos, arqueros de Lidia con sus arcos.

Hombres de Persia, Lidia y Put eran soldados en tu ejército. Vivían entre ustedes, colgando sus escudos y cascos con ustedes, y se hacían famosos.

Grecia, Tubal y Mesec comerciaron contigo. Compraron tus bienes, pagando con esclavos y objetos de bronce.

Cus, Put y Lud, y muchos otros pueblos, así como Arabia, Cub y los pueblos de la tierra prometida, todos ellos, como Egipto, serán muertos a espada.

“Mesec y Tubal están allí con toda su gente, rodeados de todas sus tumbas. Todos ellos son paganos y fueron muertos por la espada, aunque alguna vez aterrorizaron a otros cuando estaban vivos.

“Hijo de hombre, profetiza contra Gog y anuncia que esto es lo que dice el Señor Dios: Cuidado, porque te voy a condenar Gog, príncipe principal de Mesec y Tubal.

“Prenderé fuego a Magog, así como a las tierras costeras donde la gente cree que es seguro vivir, y entonces reconocerán que yo soy el Señor.

Entonces se volverá para atacar las costas y conquistará a muchos, pero un comandante pondrá fin a su comportamiento arrogante, pagándole por ello.

El Señor los atemorizará, y hará morir de hambre a todos los dioses terrenales. Todas las naciones adorarán al Señor, dondequiera que se encuentren, en todo el mundo.

Desde lejos los ríos de Etiopía, mi pueblo esparcido, mis adoradores, vendrán a traerme sus ofrendas.

Me siento honrado por las naciones desde el extremo más oriental, hasta el extremo más oriental. En todas partes la gente me trae ofrendas de incienso y sacrificios puros. Soy honrado entre las naciones, dice el Señor Todopoderoso.

Así que vayan y hagan discípulos entre la gente de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Entonces les dijo: “Vayan por todo el mundo, y anuncien la Buena Noticia a todos.

Entonces Simeón los bendijo, y dijo a María la madre de Jesús: “Este niño está destinado para hacer que muchos en Israel caigan y muchos otros se levanten. Es una señal de Dios que muchos rechazarán,

Como dice la Escritura: “Los que no han oído de la buena noticia la descubrirán, y los que no han oído entenderán”.

Esta gracia me fue dada a mí, al menos importante de todos los cristianos, con el fin de compartir con los extranjeros el increíble valor de Cristo,




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