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Referencias Cruzadas

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Hechos 28:3

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Pablo recogió un atado de leña y la lanzó al fuego. Pero de la leña salió una serpiente venenosa por causa el calor, y picó a Pablo, enroscándose en su mano.

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13 Referencias Cruzadas  

Aspiran veneno de serpiente; la mordedura de la víbora los matará.

Un mensaje sobre los animales del Néguev. Los mensajeros viajan a través de una tierra dura y hostil donde viven leones y leonas, víboras y serpientes feroces también. Sus burros van cargados de valiosos regalos, sus camellos van cargados de tesoros, para dárselos a un pueblo inútil que no puede ayudar.

¡Pero mírense! ¡No son nada y nada pueden hacer! ¡Cualquiera que los elija a ustedes es repugnante!

Incuban huevos de víbora y tejen una tela de araña. Si te comes sus huevos, morirás; si aplastas sus huevos, sólo nacerán serpientes.

Será como un hombre que huye de un león, pero termina encontrándose con un oso; o como un hombre que va a su casa y reposa su mano en la pared, pero lo muerde una serpiente.

¡Cría de víboras! ¿Cómo pueden ustedes decir algo bueno siendo malos? Pues la boca de ustedes solo dice lo que pasa por sus mentes.

Serpientes, camada de víboras, ¿cómo escaparán del juicio de Gehena?

Pero cuando Juan vio que muchos de los fariseos y saduceos venían a ser bautizados, les dijo: “¡Camada de víboras! ¿Quién les advirtió que huyeran del juicio que vendrá?

y podrán manipular serpientes, y si toman algo venenoso no les hará daño alguno; pondrán sus manos sobre los enfermos y estos serán sanados”.

La gente de allí era muy amable, y encendieron una fogata y nos llamaron para que pudiéramos estar abrigados de la lluvia y el frío.

Cuando la gente que estaba allí vio la serpiente colgando de su mano, se dijeron unos a otros: “Este hombre debe ser un asesino. Aunque escapó de la muerte en el mar, la justicia no lo dejará vivo”.

¿Es porque son siervos de Cristo? (Esto podría sonar como una locura). Pero yo he hecho mucho más. He trabajado con más esfuerzo, me han llevado preso en muchas más ocasiones, me han azotado más veces de las que puedo contar, he enfrentado la muerte una y otra vez.

Somos menospreciados, aunque somos reconocidos; nos han dado por muertos, pero aún estamos vivos; nos han dado latigazos pero no hemos muerto.




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