Después de habernos despedido de ellos, navegamos directamente hasta Cos, y al día siguiente continuamos hasta Rodas. Desde allí nos fuimos hacia Pátara
Nos embarcamos en un barco que estaba registrado en Adramitio y que se dirigía hacia los puertos costeros de la provincia de Asia, y comenzamos a navegar. Aristarco, un hombre de Tesalónica, Macedonia, iba con nosotros.
Hermanos y hermanas, siendo que nos sentimos como si hubiéramos experimentado una separación familiar, pues no los habíamos visto por un tiempo (estábamos separados físicamente pero no en espíritu), intentamos con mayor esfuerzo ir a verlos cara a cara nuevamente porque ese era nuestro deseo.