Hechos 2:2

Versión Biblia Libre

De repente se escuchó un ruido que provenía del cielo, como un viento que aullaba y llenó toda la casa donde estaban.

Referencias Cruzadas

1 Reyes 19:11

Entonces el Señor le dijo: “Sal y ponte en el monte ante el Señor”. Justo en ese momento el Señor pasó por allí. Un viento tremendamente poderoso arrasó las montañas y destrozó las rocas ante el Señor, pero el Señor no estaba en el viento. Después del viento vino un terremoto, pero el Señor no estaba en el terremoto.

Salmos 18:10

Cabalgando sobre un ángel voló, surcando los cielos sobre las alas del viento.

Cantares 4:16

¡Despierta, viento del norte! ¡Ven, viento del sur! Sopla en mi jardín para que su aroma sea llevado por la brisa. Que mi amor venga a su jardín y coma sus mejores frutos.

Isaías 65:24

Yo responderé incluso antes de que me pregunten. Mientras aún están hablando, les responderé.

Malaquías 3:1

¡Miren! Yo envío a mi mensajero, y él preparará un camino para mi. El Señor que ustedes buscan llegará de repente a su Templo. El mensajero del acuerdo que ustedes dicen que está a gusto con ustedes viene pronto, dice el Señor Todopoderoso.

Lucas 2:13

De repente aparecieron muchos seres celestiales, alabando a Dios, y diciendo:

Juan 3:8

El viento sopla hacia donde quiere y apenas se alcanza a escuchar el sonido que hace, pero no sabes de dónde viene ni hacia dónde va; así ocurre con todo aquél que nace del Espíritu”.

Hechos 2:3

Y vieron lo que parecía como diferentes llamas con forma de lenguas que se posaron sobre cada uno de ellos.

Hechos 2:6

Cuando escucharon este ruido, se reunió una gran multitud de ellos. Estaban perplejos porque todos escuchaban hablar en su propio idioma.

Hechos 4:31

Cuando terminaron de orar, la edificación donde estaban reunidos tembló. Y todos ellos fueron llenos del Espíritu Santo, y predicaban con valor la palabra de Dios.

1 Pedro 1:12

A ellos se les explicó que lo que hacían no era para ellos mismos, sino para ustedes, pues aquello de lo que ellos hablaron, ustedes lo han aprendido de aquellos que compartieron la buena noticia con ustedes por el Espíritu Santo que el cielo envió. ¡Hasta los ángeles quieren saber sobre esto!