Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Hechos 10:14

Versión Biblia Libre

Pero Pedro respondió: “¡Por supuesto que no, Señor! Nunca he comido nada que sea inmundo e impuro”.

Ver Capítulo Copiar

19 Referencias Cruzadas  

“¡Señor, por favor, no me hagas esto!” respondió Lot.

¡Así que no! Sólo los hombres pueden ir y adorar al Señor, porque eso es lo que has estado pidiendo”. Entonces hizo que echaran a Moisés y a Aarón.

“¡Por favor, no, Señor Dios!” Respondí. “Nunca me he hecho impuro. No he comido nada encontrado muerto o matado por animales salvajes desde que era joven hasta ahora. Nunca me he metido en la boca carne impura”.

Los sacerdotes no podrán comer ninguna ave o animal que se encuentre muerto o que haya sido sacrificado por las bestias”.

Sin embargo, Daniel decidió no contaminarse comiendo la rica comida y el vino del rey. Pidió al jefe de los eunucos que le permitiera no impurificarse.

“Así que asegúrate de observar la diferencia entre las aves y animales limpios e inmundos. No se vuelvan inmundos por causa de ningún animal o ave, ni por nada que corra por la tierra. He dejado clara la diferencia: son inmundos para ustedes.

No es lo que entra por la boca lo que los contamina, sino lo que sale de ella”.

Pedro levó a Jesús con él aparte y comenzó a decirle que no era bueno que hablara así. “¡Dios no permita, Señor, que algo así llegue a ocurrirte!” le dijo.

‘No, porque así no habrá suficiente aceite para ustedes ni para nosotras. Vayan a las tiendas y compren aceite para ustedes’.

Un leproso se acercó a él, y se arrodilló, adorándolo, y le dijo: “Señor, si quieres, por favor sáname”.

se dieron cuenta de que algunos de sus discípulos comían con las manos “impuras” (es decir, sin lavar).

“No”, dijo Isabel. “Será llamado Juan”.

“Señor, tú no tienes un cántaro, y el pozo es profundo. ¿De dónde vas a sacar el agua de vida?” respondió ella.

Entonces oyó una voz que dijo: “¡Levántate, Pedro! ¡Mata y come!”

Y Pedro les dijo: “Sin duda alguna, ustedes saben que no se le permite a un judío reunirse o visitar extranjeros. Pero Dios me ha mostrado que no me corresponde a mí llamar impuro o inmundo a ninguno.

“‘¿Quién eres, Señor?’ respondí. “‘Yo soy Jesús de Nazaret, a quien tu persigues,’ me dijo.

“¿Quién eres, Señor?” preguntó Saulo. “Yo soy Jesús, al que persigues”, le respondió.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos