Avancemos en la medida que Dios nos lo permite.
Entonces se despidió y emprendió su viaje desde Éfeso, diciéndoles: “Regresaré y los veré nuevamente si es la voluntad de Dios”.
Oren para que pueda regresar a ustedes con alegría, conforme a la voluntad de Dios, para que podamos disfrutar juntos, en compañía.
Esta vez no quiero ir a verlos por poco tiempo. Espero poder quedarme más tiempo con ustedes, si el Señor lo permite.
Pero pronto iré a visitarlos, si es la voluntad del Señor. Entonces podré darme cuenta de qué cosas están diciendo estas personas arrogantes, y qué tipo de poder tienen.
Es imposible que los que una vez comprendieron y experimentaron el don celestial de Dios—que participaron del recibimiento del Espíritu Santo,
Lo que deberían decir es: “Si Dios quiere, viviremos de esta manera, y haremos planes para hacer aquello”.