Génesis 31:42

Versión Biblia Libre

Si no fuera por el Dios de mi padre, el Dios de Abraham, el increíble Dios de Isaac, quien me cuidó, me habrías despedido sin nada. Pero Dios vio mi sufrimiento, lo duro que trabajé y te condenó anoche”.

Referencias Cruzadas

Génesis 11:5

Pero el Señor descendió para mirar la ciudad y la torre que estas personas estaban construyendo.

Génesis 16:11

Y siguió diciéndole: “Escucha, ahora estás embarazada y tendrás un hijo. Le pondrás por nombre Ismael, porque el Señor ha escuchado cuánto has sufrido.

Génesis 16:13

Desde ese momento, Agar clamó al Señor que habló con ella: “Eres el Dios que me ve”, porque ella dijo: “Aquí vi al que me ve”.

Génesis 27:33

Isaac entonces comenzó a temblar y preguntó: “¿Quién fue el que se fue de cacería y me trajo la comida? Ya la comí toda antes de que llegaras y lo bendije. No puedo retirar su bendición ya”.

Génesis 29:32

Así que Lea quedó embarazada, y tuvo un hijo a quien llamó Rubén, pues dijo: “¡El Señor vio lo mucho que he sufrido y ahora mi esposo me amará!”

Génesis 31:12

“Y me dijo: ‘Mira y te darás cuenta de que las cabras macho que se aparean con el resto del rebaño, tienen rayas, o tienen pintas o manchas, porque he visto lo que Labán te hizo.

Génesis 31:24

Pero por la noche Dios visitó a Labán en un sueño y le dijo: “Ten cuidado con lo que le dices a Jacob. No trates de persuadirlo para que regrese, ni lo amenaces”.

Génesis 31:29

Podría castigarte, pero el Dios de tu padre me habló anoche y me dijo: ‘Cuidado con lo que le dices a Jacob. No intentes persuadirlo para que vuelva, ni tampoco lo amenaces’.

Génesis 31:5

“He notado que su padre me está tratando diferente a la manera como me trataba antes”, les dijo. “Pero el Dios de mi padre estará conmigo.

Génesis 31:53

Que el Dios de Abraham y el Dios de Nacor, el Dios de nuestros antepasados, sea el que juzgue entre nosotros cualquier disputa”. Jacob, a su vez, hizo la solemne promesa en nombre de maravilloso Dios de su padre Isaac.

Génesis 32:9

Entonces Jacob oró: “¡Dios de mi abuelo Abraham, Dios de mi padre Isaac! Señor, tú fuiste quien me dijo: ‘Vuelve a tu país y a la casa de tu familia, y te trataré bien’

Génesis 35:3

Debemos prepararnos e ir a Betel para construir un altar a Dios que me respondió en mi tiempo de angustia. Él ha estado conmigo donde quiera que haya ido”.

Génesis 46:1

Así que Israel se fue a Egipto con todo lo que tenía. Cuando llegó a Beerseba ofreció sacrificios al Dios de su padre Isaac.

1 Crónicas 12:17

David salió a recibirlos y les dijo: “Si han venido en son de paz para ayudarme, podemos ser amigos. Pero si han venido a entregarme a mis enemigos, aunque no he hecho nada malo, que el Dios de nuestros padres vea lo que hacen y los condene”.

Salmos 31:7

Celebraré, feliz en tu amor que nunca falla, porque has visto los problemas que enfrento y has atendido mis luchas.

Éxodo 3:7

“Soyplenamente consciente de la miseria de mi pueblo en Egipto”, le dijo el Señor. “Los he escuchado gemir por culpa de sus capataces. Sé cuánto están sufriendo.

Isaías 8:13

El Señor Todopoderoso es a quien deben considerar como santo. A él es a quien debes temer, a él es a quien debes respetar.

Daniel 2:23

Te doy gracias y te alabo, Dios de mis padres, porque me has dado sabiduría y poder. Ahora me has revelado lo que te pedimos; nos has revelado el sueño del rey”.

Deuteronomio 15:13

Y cuando los liberes, no los despidas sin nada.

Judas 1:9

Incluso el arcángel Miguel, cuando discutía con el diablo sobre el cuerpo de Moisés, no se animó a condenarlo con insultos difamatorios, sino que dijo: “Que el Señor te reprenda”.