Y Jacob tuvo un sueño en el que veía una escalera que comenzaba en la tierra, y llegaba hasta el cielo. Vio a los ángeles de Dios que subían y bajaban en ella.
Pero Dios se le apareció a Abimelec en un sueño, y le dijo: “¡Presta atención! Morirás, porque la mujer que has tomado ya está casada. Ella tiene un esposo”.
Porque el Señor busca por toda la tierra la oportunidad de mostrar su poder a favor de los que le son total y sinceramente devotos. Tú has actuado de forma estúpida al hacer esto. Así que de ahora en adelante siempre estarás en guerra”.
¡No tengan miedo, porque yo estoy con ustedes! No tengan miedo, porque yo, su Dios, los haré fuertes, y ciertamente los ayudaré. Los apoyaré con mi mano fuerte, actuando a favor de lo que es justo.
En el primer año del reinado de Belsasar como rey de Babilonia, Daniel tuvo un sueño en el que pasaban visiones por su mente mientras estaba acostado. Después escribió el sueño, describiéndolo en forma resumida.
Mientras José pensaba en todo esto, un ángel del Señor se le apareció en un sueño y le dijo: “José, hijo de David, no temas casarte con María porque ella está embarazada por obra del Espíritu Santo.