Génesis 14:20

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Que el Altísimo sea alabado, por entregar en tu mano a tus enemigos”.Entonces Abrán le dio a Melquisedec una décima parte de todo.

Referencias Cruzadas

Génesis 14:21

El rey de Sodoma le dijo a Abrán: “Devuélveme a mi gente, y quédate con todo lo demás”.

Génesis 24:27

Y oró: “Gracias Señor, Dios de mi señor Abraham”. “No has olvidado tu promesa y tu fidelidad con mi señor. ¡Y Señor, tú me has guiado directamente al hogar de los familiares de mi señor Abraham!”

Génesis 28:22

Y este pilar que he levantado aquí, será la casa de Dios, y yo te daré la décima parte de lo que me des”.

Génesis 47:24

Sin embargo, cuando recojan la cosecha, tienen que dar una quinta parte al Faraón. Las otras cuatro quintas partes las podrán guardar como semilla para los campos y como alimento para ustedes mismos, sus hogares y sus hijos”.

Génesis 47:26

Así que José hizo una ley para Egipto, que sigue vigente hoy en día: Que una quinta parte de todos los productos de la tierra pertenecen al Faraón. Sólo la tierra de los sacerdotes estaba exenta ya que no pertenecía al Faraón.

Génesis 9:26

Entonces Noé continuó: “Bendito sea el Señor, Dios de Sem, y que Canaán sea su esclavo.

2 Samuel 18:28

Ahimaas saludó a gritos al rey. Luego se acercó y se inclinó boca abajo ante el rey. “¡Bendito sea el Señor, tu Dios!”, dijo. “¡Ha derrotado a los hombres que se rebelaron contra Su Majestad!”

2 Crónicas 31:12

el pueblo trajo fielmente sus ofrendas, diezmos y regalos dedicados. El levita Conanías era el responsable de ellos, y su hermano Simei era el segundo al mando.

Nehemías 10:37

Llevaremos a los almacenes del Templo de nuestro Dios, para los sacerdotes, la primera parte de nuestra harina molida, de nuestras ofrendas de grano, del fruto de todos nuestros árboles, y de nuestro vino nuevo y aceite de oliva. También llevaremos el diezmo de nuestros productos a los levitas, porque los levitas son los que recogen los diezmos en todas las ciudades agrícolas.

Nehemías 13:12

Todos los habitantes de Judá trajeron entonces los diezmos de grano, vino nuevo y aceite de oliva a los almacenes.

Salmos 144:1

Alaben al Señor. Él es mi roca. Él me entrena para la batalla y me da destreza para la guerra.

Salmos 44:3

No conquistaron la tierra con sus espadas; no fue a través de su fuerza que ganaron la victoria, fue por tu fuerza, tu poder, y tu compañía, porque los amabas.

Salmos 68:19

Sea el Señor bendito, porque cada día soporta nuestras cargas. Dios es nuestra salvación. Selah.

Éxodo 18:10

Jetro anunció: “Bendito sea el Señor, que te salvó de los egipcios y del Faraón.

Amós 4:4

¿Por qué no van a Betel y pecan? ¿Irán a Guilgal para multiplicar sus pecados? Ofrezcan sacrificios en la mañana, y traigan diezmos después de tres dias.

Malaquías 3:10

Traigan todo el diezmo a la tesorería para que haya alimento en mi Templo. Pruébenme en esto, dice el Señor Todopoderoso, y yo abriré las ventanas de los cielos y haré que sobreabunden las bendiciones tanto que no tendrán lugar para ellas.

Malaquías 3:8

¿Debe el pueblo defraudar a Dios? ¡Aún así ustedes me han defraudado! Pero ustedes me preguntan “¿Cómo te hemos defraudado?” En los diezmos y en las ofrendas.

Números 28:26

“Durante la celebración del Festival de las Semanas, celebrarán una reunión sagrada el día de las primicias cuando presenten una ofrenda de grano nuevo al Señor. No hagan ningún tipo de trabajo.

Lucas 18:12

Yo ayuno dos veces a la semana, y pago el diezmo de mi salario’.

Romanos 15:16

de ser un ministro de Jesucristo para los extranjeros, como un sacerdote que predica la buena noticia de Dios, a fin de que puedan convertirse en una ofrenda agradable, santificada por el Espíritu Santo.

Efesios 1:3

Alabado sea Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien nos ha bendecido en Cristo con todo lo que es espiritualmente bueno en el mundo celestial,

Deuteronomio 12:17

En sus pueblos no deben comer el diezmo de su grano o del vino nuevo ni del aceite de oliva; o los primogénitos de sus manadas o rebaños, ni ninguna de las ofrendas que hagan para cumplir una promesa, sus ofrendas voluntarias o susofrendas especiales.

Deuteronomio 14:23

Debes comer una décima parte de tu grano, vino nuevo y aceite de oliva, y los primogénitos de tus rebaños y manadas, en presencia del Señor tu Dios en el lugar que elija, para que aprendas a respetar siempre al Señor tu Dios.

Deuteronomio 14:28

Al final de cada tercer año, recoge una décima parte de todos tus productos de ese año y guárdalos en tu pueblo.

Josué 10:42

Todos los reyes y sus tierras fueron conquistados por Josué en una sola campaña porque el Señor, el Dios de Israel, luchaba por los israelitas.