Los entregó a los gabaonitas, y ellos los colgaron en la colina en presencia del Señor. Los siete murieron al mismo tiempo, ejecutados al comienzo de la cosecha de cebada.
El Señor le dijo a Moisés, “Levanta tu mano sobre Egipto, para aparezcan las langostas y se coman todas las plantas del país, todo lo que haya dejado el granizo”.
Habrá tantas que cubrirán el suelo para que nadie pueda verlas. Comerán los cultivos que haya dejado el granizo, así como todos los árboles que crezcan en tus campos.
¿Acaso, una vez que tiene todo listo, no siembra semillas como el eneldo y el comino, no planta trigo y cebada en hileras, con el grano de la escanda como cerco?
“Consigue trigo, cebada, frijoles, lentejas, mijo y espelta, y mézclalos en una vasija. Utilízalos para hacer pan para ti. Esto es lo que debes comer durante los 390 días que permanezcas acostado.