La cantidad total de plata de los que habían sido contados en el censo era de 100 talentos y 1.775 siclos (usando el estándar del siclo del santuario).
“Cuando hagas un censo de los israelitas, cada hombre debe pagarle al Señor el rescate por su vida cuando sea contado. Así no sufrirán la plaga cuando sean contados.
Tomen este dinero pagado por los israelitas y úsenlo para los gastos de los servicios del Tabernáculo de Reunión. Servirá como recordatorio para que los israelitas hagan expiación por sus vidas en presencia del Señor”.