Los hábiles artesanos entre los trabajadores hicieron las diez cortinas para el Tabernáculo. Estaban hechas de lino finamente hilado junto con hilos azules, púrpura y carmesí, bordadas con querubines.
Salomón se dirigió con toda la asamblea al lugar alto de Gabaón, pues allí se encontraba la Tienda del Encuentro de Dios que Moisés, el siervo del Señor, había hecho en el desierto.
Me reuniré contigo allí como está dispuesto sobre la tapa de la expiación, entre los dos querubines que están de pie sobre el Arca del Testimonio, y hablaré contigo sobre todas las órdenes que daré a los israelitas.
“También he elegido a Aholiab, hijo de Ahisamac, de la tribu de Dan, para que le ayude. También he dado a todos los artesanos las habilidades necesarias para hacer todo lo que te he ordenado hacer:
Martillaron finas láminas de oro y cortaron hilos para tejerlos con los hilos azul, púrpura y escarlata, junto con lino fino, todo hábilmente trabajado.