Los hábiles artesanos entre los trabajadores hicieron las diez cortinas para el Tabernáculo. Estaban hechas de lino finamente hilado junto con hilos azules, púrpura y carmesí, bordadas con querubines.
Así que todo el trabajo para el Tabernáculo, el Tarbernáculo de Reunión, estaba terminado. Los israelitas hicieron todo lo que el Señor le había ordenado a Moisés.