Deuteronomio 7:10

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Pero no duda en pagar a los que le odian, destruyéndolos.

Referencias Cruzadas

Éxodo 20:5

No debes inclinarte ante ellos ni adorarlos, porque yo soy el Señor tu Dios y soy celosamente exclusivo. Yo pongo las consecuencias del pecado de los que me odian sobre sus hijos, sus nietos y sus bisnietos;

Éxodo 34:7

Sigo mostrando mi amor fiel a miles de personas, perdonando la culpa, la rebelión y el pecado. Pero no dejaré a los culpables impunes, el impacto del pecado afectará no sólo a los padres, sino también a sus hijos y nietos, hasta la tercera y cuarta generación”.

Proverbios 11:31

Si los justos reciben recompensa aquí en la tierra, ¡cuanto más los malvados!

Isaías 59:18

Pagará a todos por lo que han hecho: furia a sus enemigos, venganza a los que se le oponen, revancha a las tierras lejanas.

Jeremías 32:18

Tú das tu amor confiable a miles de personas, pero castigas los pecados de los padres las consecuencias afectan también a sus hijos, Dios grande y poderoso cuyo nombre es Señor Todopoderoso,

Nahúm 1:2

El Señor es un Dios celoso y vengador. El Señor Dios es vengador y lleno de enojo. El Señor toma venganza de sus enemigos, y está enojado con los que son hostiles hacia él.

Números 10:35

Cada vez que el Arca avanzaba, Moisés gritaba: “Levántate, Señor, y que tus enemigos se dispersen, y que los que te odian huyan de ti”.

Números 14:18

El Señor es lento para enojarse y está lleno de amor confiable, perdonando el pecado y la rebelión. Sin embargo, no permitirá que los culpables queden impunes, trayendo las consecuencias del pecado de los padres a sus hijos, nietos y bisnietos.

Romanos 12:19

Queridos amigos, no procuren la venganza, más bien dejen que Dios sea quien haga juicio—tal como señala la Escritura: “‘Es a mí a quien corresponde administrar la justicia, yo pagaré,’ dice el Señor”.

Deuteronomio 32:25

Afuera en las calles la espada mata a sus hijos, dentro de sus casas, mueren de miedo; jóvenes y mujeres jóvenes, niños y ancianos.

Deuteronomio 32:35

Me aseguro de que se haga justicia, lo pagaré. Se acerca el momento en que caerán, se acerca el día del desastre, su perdición llegará pronto.

Deuteronomio 32:41

Cuando afile mi brillante espada y la recoja para ejecutar el juicio, pagaré a mis enemigos y castigaré a los que me odian como se merecen.

Deuteronomio 5:9

No debes inclinarte ante ellas ni adorarlas, porque yo soy el Señor tu Dios y soy celosamente exclusivo. Yo pongo las consecuencias del pecado de los que me odian sobre sus hijos, nietos y bisnietos;

Deuteronomio 7:11

Así que guarden los mandamientos, preceptos y normas que les doy para que los sigan hoy.

Deuteronomio 7:9

Por eso puedes estar seguro de que el Señor tu Dios es el verdadero Dios, el Dios fiel que cumple su acuerdo basado en un amor digno de confianza a mil generaciones de los que le aman y guardan sus mandamientos.