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Referencias Cruzadas

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Apocalipsis 13:16

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E hizo que todos, fueran débiles o poderosos, ricos o pobres, esclavos o libres, recibieran una marca en su mano derecha o en sus frentes.

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26 Referencias Cruzadas  

Entonces vi gente sentada en tronos, y se les había dado la responsabilidad de juzgar, y las almas de los que habían sido decapitados por su testimonio acerca de Jesús y por predicar la palabra de Dios. Ellos no habían adorado a la bestia ni a su imagen, ni habían recibido la marca en sus frentes ni en sus manos. Y ellos vivieron y reinaron con Cristo durante mil años.

Y capturaron a la bestia, junto al falso profeta que hacía milagros en su presencia (por medio de los cuales engañaba a los que habían recibido la marca de la bestia y los que adoraban su imagen). Ambos fueron lanzados vivos en el lago de fuego que arde con azufre.

“¡No le hagan daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos puesto un sello en las frentes de los verdaderos seguidores de Dios!”

“Recorre toda la ciudad de Jerusalén y pon una marca en la frente de los que suspiran y se lamentan por todos los pecados repugnantes que se cometen allí”.

Aquí pueden comer la carne de los muertos: reyes, líderes, y hombres poderosos, así como carne de caballos y sus jinetes, la carne de todas las gentes, libres o esclavos, grandes y pequeños”.

Amárrenlas en sus manos como recordatorio y pónganlas también en sus frentes.

Concentren sus mentes en las palabras que les estoy diciendo. Amárrenlas en sus manos como recordatorio y pónganlas también en sus frentes.

Cuando celebren esta ceremonia será como una señal en su mano y un recordatorio en la frente de que esta enseñanza del Señor debe ser contada con regularidad. Porque el Señor los sacó de Egipto con su gran poder.

Y se escuchó una voz que provenía desde el trono, y dijo: “Alaben a nuestro Dios, todos los que le sirven y lo respetan, desde el más pequeño hasta el más grande”.

Vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante el trono, y los libros se abrieron. Y se abrió otro libro, el libro de la vida, y los muertos fueron juzgados conforme a lo que estaba escrito en ellos y lo que habían hecho.

Y los reyes de la tierra, los grandes líderes, los ricos, los poderosos, y todas las personas, esclavos o libres, se ocultaron en cuevas y entre las rocas de las montañas.

“Dios ha cuidado de mi para que hoy pueda estar aquí como testigo para todos, tanto para las personas comunes como para las personas más prestigiosas. Yo solo estoy repitiendo lo que Moisés y los profetas dijeron que sucedería:

El Señor bendecirá a todos los que lo adoran, quienesquiera que sean.

No tiene en mayor consideración a los ricos que a los pobres, pues todos son personas que él mismo hizo.

Vi lo que parecía como un mar de vidrio mezclado con fuego. Y junto al mar de vidrio estaban los que habían vencido a la bestia y su imagen, y el número de su nombre. Y tenían arpas que Dios les había dado

Las naciones se enfurecieron, pero tu juicio ha venido, el tiempo en que serán juzgados los muertos. Este es el momento en que tus siervos los profetas y los creyentes recibirán su recompensa, aquellos que respetan tu autoridad, tanto los débiles como los poderosos. También es el tiempo en que destruirás a los que destruyen la tierra.

En esta nueva situación no hay griego ni judío, no hay circuncisos o incircuncisos, extranjeros, bárbaros, esclavos o libres, pues Cristo es todo, y él vive en todos nosotros.

Ustedes saben que todo el que hace lo bueno será recompensado por el Señor, sea siervo o libre.

Por favor, no me agobien más, porque llevo en mi cuerpo las marcas de Jesús.

Ya no hay más judío o griego, esclavo o libre, hombre o mujer, pues ustedes todos son uno en Cristo Jesús.

Porque fue por medio de un Espíritu que todos fuimos bautizados en un cuerpo. No importa si somos judíos o griegos, esclavos o libres. A todos se nos dio a beber del mismo Espíritu.

sean de alta o baja sociedad, sean ricos o pobres!

También acordaron que cualquiera que se negara a seguir al Señor, el Dios de Israel, sería condenado a muerte, ya fuera joven o viejo, hombre o mujer.

Así como Janes y Jambres se opusieron a Moisés, estos maestros también se oponen a la verdad. Son personas con mentes corruptas cuya supuesta fe en Dios es una mentira.

Y si alguien le pregunta: “¿Cuál es el motivo de esas heridas en tu espalda?” él responderá: “Fui herido en la casa de un amigo”.




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