Cuídate tú también de él, porque ejerció gran oposición a lo que decíamos.
¡Cuidado con esos perros! ¡Cuidado con esos que hacen el mal! ¡Cuidado con esos mutiladores!
Así como Janes y Jambres se opusieron a Moisés, estos maestros también se oponen a la verdad. Son personas con mentes corruptas cuya supuesta fe en Dios es una mentira.
Alexander, el herrero, me causó muchos problemas. Que Dios lo juzgue por lo que hizo.
La primera vez que tuve que defenderme, nadie estuvo allí acompañándome, sino que todos me abandonaron. Ojalá no se les tenga en cuenta.