2 Timoteo 3:2

Versión Biblia Libre

Habrá personas amadoras de sí mismas y del dinero. Serán jactanciosas, arrogantes, abusivas, desobedientes a sus padres, ingratas, y con ausencia de Dios en sus vidas.

Referencias Cruzadas

Salmos 10:3

Porque los malvados se jactan de sus deseos. Alaban al codicioso, pero tratan al Señor con desprecio.

Salmos 49:6

Ellos confían en su riqueza; alardean de sus posesiones,

Salmos 52:1

Grandes hombres, ¿Por qué alardean de todas las cosas malas que han hecho? El gran amor de Dios permanece todo el día.

Proverbios 6:17

los ojos arrogantes, una lengua mentirosa, las manos que matan al inocente,

Isaías 10:15

¿Acaso un hacha dice que es más importante que la persona que la afila? ¿Acaso una sierra se jacta de ser más grande que la persona que la usa? Sería como si una vara agitara a la persona que la sostiene, o un bastón levantara a una persona, que ciertamente no es de madera.

Daniel 11:36

El rey hará lo que quiera, alabándose a sí mismo y considerándose más grande que cualquier dios, incluso diciendo cosas escandalosas contra el Dios de los dioses. Tendrá éxito hasta que termine el tiempo de la ira, pues se cumplirá lo que se ha decidido.

Daniel 7:25

Hablará palabras de desafío contra el Altísimo y oprimirá al pueblo consagrado del Altísimo, e intentará cambiar los tiempos y las leyes, y serán puestos bajo su poder por un tiempo, dos tiempos y medio tiempo.

Mateo 15:6

no tiene que honrar a su padre. De esta manera ustedes han anulado la palabra de Dios por causa de sus tradiciones.

Lucas 12:15

“Estén alerta, y cuídense de todo pensamiento y acción de avaricia, pues la vida de una persona no se mide por la cantidad de posesiones que tiene”.

Lucas 16:14

Los Fariseos, que amaban el dinero, oyeron lo que Jesús dijo y se burlaron de él.

Lucas 6:35

No. Amen a sus enemigos, háganles el bien, y presten sin esperar que les paguen. Entonces recibirán una gran recompensa, y ustedes serán los hijos del Altísimo, porque él es bueno con los ingratos y los malvados.

Hechos 5:36

Hace un tiempo Teudas quiso hacerse famoso, y cerca de cuatrocientos hombres se le unieron. Fue asesinado y todos los que lo seguían quedaron dispersos y no lograron nada.

Romanos 11:18

entonces no debes menospreciar a las demás ramas. Si te sientes tentado a jactarte, recuerda que no eres tu quien sustenta a las raíces, sino que las raíces te sustentan a ti.

2 Corintios 5:15

Cristo murió por todos para que ya no vivieran para sí mismos, sino para él, quien murió y resucitó para ellos.

Filipenses 2:21

Otras personas solo se preocupan por sus propios intereses y no los de Jesucristo.

Colosenses 3:5

Así que maten su naturaleza mundana – el pecado sexual, la inmoralidad, la lujuria, los malos deseos, la codicia – pues esto es idolatría.

2 Tesalonicenses 2:4

Él es el enemigo de Dios, y con arrogancia se coloca por encima de todo lo que se llame Dios y reciba adoración. Incluso se instala en el Templo de Dios, y afirma que él es Dios.

1 Timoteo 1:20

Himeneo y Alexander son ejemplo de ello, y yo los he “entregado a Satanás” para que aprendan a no dar una mala imagen de Dios.

1 Timoteo 1:9

También sabemos que la ley no se instituyó por causa de los que son justos, sino por causa de los que son rebeldes e ignoran la ley. Se aplica a personas que no sirven a Dios, que son pecadoras, que no respetan la santidad de las cosas y que son completamente profanos. Es para los que matan a padres y madres, para los asesinos,

1 Timoteo 3:3

Debe abstenerse de emborracharse o ser violento, más bien debe ser manso y no debe buscar contienda o codiciar dinero.

1 Timoteo 6:10

Pues el deseo de ser ricos conduce a muchas clases de malos resultados. Algunos de los que anhelaban esto se han apartado de la verdad, y se han causado daño a sí mismos, experimentando gran dolor.

1 Timoteo 6:4

son arrogantes y no entienden nada. Ellos están obsesionados con la especulación y los debates filosóficos que solo conducen a celos, discusiones y chismes malintencionados y desconfianza maligna,

2 Timoteo 3:4

y engañarán a otros, con total desconsideración. Son personas absurdamente vanidosas, que viven con tanto interés por el placer que no se preocuparán por amar a Dios.

Santiago 2:8

Si ustedes realmente observan la ley real de la Escritura: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”, entonces hacen bien.

Santiago 4:16

Pero ahora están solo llenos de ideas vanas. Y toda esta jactancia es maligna.

Santiago 4:6

Pero Dios nos da todavía más gracia, como dice la Escritura: “Dios está en contra de los arrogantes, pero da gracia a los humildes”.

1 Pedro 5:5

Jóvenes, hagan lo que los ancianos les dicen. Sin duda deberían todos servirse unos a otros con humildad, porque “Dios aborrece a los orgullosos, pero obra en favor de los humildes”.

2 Pedro 2:10

Esto también aplica a los que siguen los deseos humanos corruptos, y que con desprecio ignoran la autoridad. Son arrogantes y orgullosos, y no temen difamar a los seres celestiales.

2 Pedro 2:12

Estas personas son como bestias sin razón, que nacen para ser capturadas y destruidas. Condenan cosas que no conocen, y serán destruidos como animales.

2 Pedro 2:18

Se jactan de sí mismos con alardes sin sentido, incitan a los deseos sexuales pervertidos, y así atraen a la inmoralidad a los que apenas acaban de escapar de una vida de error.

2 Pedro 2:3

Pues con avaricia los explotarán a ustedes con historias falsas. Sin embargo, ellos ya están condenados: su sentencia ha estado colgando de sus cuerpos hace mucho tiempo, y su destrucción no tardará.

Judas 1:16

Tales personas son gruñonas, que siempre están quejándose. Siguen sus propios deseos malos, y hablan con jactancia de sí mismos, y halagan a otros para lograr sus propios fines.

Apocalipsis 13:1

Y el dragón se paró en la orilla del mar. Entonces vi a una bestia saliendo del mar. Tenía diez cuernos y siete cabezas, con diez coronas pequeñas en sus cuernos, y tenía nombres blasfemos en sus cabezas.

Apocalipsis 16:11

y maldecían al Dios del cielo por causa de su dolor y sus llagas, pero no se arrepentían ni dejaban de hacer lo que estaban haciendo.

Apocalipsis 16:21

Cayó del cielo una gran tormenta de granizo sobre la gente, y cada piedra pesaba cien libras. Y la gente maldecía a Dios porque la plaga del granizo era terrible en gran manera.

Apocalipsis 16:9

Y se quemaban por el intenso calor, y maldecían el nombre de Dios, quien controlaba estas plagas. Y no se arrepentían ni le daban gloria.