El granjero que hace todo el trabajo duro debe ser el primero en beneficiarse de la cosecha.
Los que cuidan de una higuera comen su fruto,. Y los que cuidan de su amo serán recompensados.
“Porque el reino de los cielos es como un terrateniente que salió temprano por la mañana para contratar trabajadores para su viña.
De inmediato, el que tenía cinco talentos fue y los invirtió en un negocio, y obtuvo otros cinco talentos.
“La cosecha es grande, pero hay pocos trabajadores”, les dijo. “Oren para que el Señor de la cosecha envíe trabajadores a sus campos.
¡Hago esto por causa de la buena noticia para yo también ser partícipe de sus bendiciones!
Considera todo lo que te digo. Y el Señor te ayudará a comprender todas estas cosas.
Es necesario que sean pacientes, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, reciban lo que él ha prometido.
La tierra que ha sido regada por la lluvia, y produce cosecha para quienes la trabajan, tiene la bendición de Dios.