El vigilante informó: “El mensajero ha llegado hasta ellos, pero no regresa. ¡Su forma de conducir hace que parezca que es Jehú, hijo de Nimsi, pues conduce como un loco!”
“El primer hombre me parece que corre como Ahimaas, hijo de Sadoc”, dijo el vigilante. “Es un buen hombre”, respondió el rey. “Traerá buenas noticias”.
El rey envió a un segundo jinete. Se acercó a ellos y les dijo: “El rey te manda a preguntar: ‘¿Vienes en son de paz?’” . “¿Qué les importa la paz a ustedes?” Respondió Jehú. “Date la vuelta y sígueme”.
Cuando llegues allí, busca a Jehú, hijo de Josafat, hijo de Nimsí. Entra, aléjalo de sus compañeros y llévalo a una habitación interior. Haz que deje a sus amigos, llévalo a una habitación privada,