Llamó a su marido y le dijo: “Por favor, envíame uno de los criados y un asno para que pueda ir corriendo a ver al hombre de Dios y volver”.
Entonces ella subió y lo puso en la cama del hombre de Dios. Luego cerró la puerta y se fue.
“¿Por qué necesitas ir a verlo hoy?” , le preguntó él. “No es luna nueva ni sábado”. “No te preocupes por eso”, respondió ella.
Puso la silla de montar en el asno y le dijo a su criado: “¡Vamos rápido! No te detengas por mí si no te lo digo yo”.
Por favor, corre a su encuentro y pregúntale: ‘¿Va todo bien contigo, con tu marido y con tu hijo?’” . “Todo está bien”, respondió ella.
Entonces las hermanas enviaron un mensaje a Jesús: “Señor, tu amigo está enfermo”.
Lida estaba cerca a Jope, así que los discípulos que estaban en Jope, al saber que Pedro estaba en Lida, enviaron a dos hombres con el siguiente mensaje: “Por favor, ven acá de inmediato”.