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Referencias Cruzadas
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2 Reyes 4:13

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Entonces Eliseo le dijo a Giezi: “Por favor, dile: ‘te has tomado muchas molestias por nosotros. ¿Qué podemos hacer ahora por ti? ¿Quieres que hablemos por ti al rey o al comandante del ejército?’” “Vivo con mi propia gente”, respondió ella.

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22 Referencias Cruzadas  

Por lo tanto no me quedaré con nada, excepto lo que mis hombres han comido, y la parte de los que me han acompañado, es decir, permite que Aner, Escol, y Mamré conserven su parte”.

Díganle a Amasa: ‘¿No eres tú también mi carne y mi sangre? Que Dios me castigue muy severamente si a partir de ahora no eres tú el comandante de mi ejército en lugar de Joab’”.

El Señor le pagará la sangre que derramó, pues sin que mi padre David lo supiera, mató a dos hombres buenos que eran mejores que él. Con su espada mató a Abner, hijo de Ner, comandante del ejército de Israel, y a Amasa, hijo de Jeter, comandante del ejército de Judá.

Y le dijo a su criado Giezi: “Pídele a la sunamita que venga aquí”. Entonces Giezi la llamó y ella vino a ver a Eliseo.

Después de que ella se fue, Eliseo preguntó: “¿Qué podemos hacer por ella?”. “No tiene hijo, y su marido es viejo”, respondió Giezi.

Eliseo le dijo a la mujer cuyo hijo había resucitado: “Tú y tu familia tienen que prepararsu equipajee irse, y tendrán que vivir donde puedan, en otro lugar como extranjeros. Porque el Señor ha anunciado que vendrá una hambruna a la tierra y que durará siete años”.

Cuando llegó, vio a los comandantes del ejército sentados. “Tengo un mensaje para usted, comandante”, dijo. “¿Para cuál de nosotros?” preguntó Jehú. “Para usted, comandante”, respondió.

Confía en el Señor, y haz el bien. Vive en la tierra y alimenta tu fidelidad.

Por favor, recíbanla en el Señor, como deben hacerlo los creyentes, y ayúdenla en todo lo que necesite, porque ha sido de gran ayuda para mucha gente, incluyéndome a mí.

Envíen mis saludos a María, que ha trabajado mucho por ustedes,

No amen el dinero. Estén contentos con lo que tienen. Dios mismo dijo: “Nunca te defraudaré; nunca te abandonaré”.

Dios no hubiera sido injusto como para olvidarse de lo que ustedes han hecho y del amor que le han demostrado mediante el cuidado que han brindado a los hermanos creyentes, lo cual es algo que todavía siguen haciendo.




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