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Referencias Cruzadas
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2 Pedro 2:14

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Siempre están en búsqueda de relaciones adúlteras, y no pueden dejar de pecar. Seducen a quienes son vulnerables, y se han entrenado en la codicia; son una descendencia maldita.

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28 Referencias Cruzadas  

“Si me he desviado del camino de Dios, si he dejado que lo que veo se convierta en mis deseos, si hay alguna mancha de pecado en mis manos,

Si una mujer me ha seducido, o si he buscado la oportunidad de acostarme con la mujer de mi prójimo,

Ella no sigue el camino que conduce a la vida, sino que deambula sin saber que está perdida.

No dejes que tu mente codicie su belleza, y dejes que te hipnotice con sus pestañas.

Lávense y límpiense. ¡Desháganse de sus pecados pues no quiero verlos! ¡Dejen de hacer el mal!

Cuando mi espada haya terminado lo que tiene que hacer en los cielos, descenderá sobre Edom, sobre el pueblo que he condenado a la destrucción.

Ningún bebé morirá a los pocos días, y ningún adulto morirá sin haber vivido una larga vida. Los que lleguen a los cien años serán considerados como simples niños, y los que no lleguen a los cien serán vistos como si estuvieran bajo una maldición.

¿Pueden los etíopes cambiar el color de su piel? ¿Puede un leopardo cambiar sus manchas? De la misma manera tú no puedes cambiar y hacer el bien porque estás muy acostumbrada a hacer el mal.

y diles que esto es lo que dice el Señor Dios: Viene el desastre para las mujeres que cosen brazaletes de amuletos mágicos para sus muñecas y hacen velos para que toda la gente los use como formas de atraparlos y explotarlos. ¿Creen que pueden poner una trampa para la vida de mi pueblo y aún así conservar sus propias vidas?

¡Cría de víboras! ¿Cómo pueden ustedes decir algo bueno siendo malos? Pues la boca de ustedes solo dice lo que pasa por sus mentes.

“También dirá a los de su izquierda: ‘¡apártense de mi, ustedes malditos, vayan al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles!

Pero yo les digo que todo el que mira con lujuria a una mujer ya ha cometido adulterio en su corazón.

Porque aparecerán falsos Mesías y falsos profetas, y harán milagros y maravillas para engañar, si fuese posible, a los escogidos de Dios.

¿Cómo pueden creer en mí si buscan alabanza entre los unos y los otros y no la alabanza del único Dios verdadero?

Estas personas no sirven a Cristo nuestro Señor sino a sus propios apetitos, y con su forma de hablar lisonjera y palabras agradables engañan las mentes de las personas desprevenidas.

Por supuesto, tales divisiones entre ustedes deben ocurrir para que los que son sinceros puedan darse a conocer por medio de su testimonio.

Todos una vez fuimos así, y nuestra conducta estaba determinada por los deseos de nuestra naturaleza humana pecaminosa y nuestros malos pensamientos. Como todos los demás, en nuestra naturaleza éramos hijos de la ira.

Ya no deberíamos ser más como niños, sacudidos por cualquier viento de doctrina, confundidos por los engaños humanos, y conducidos al error por personas astutas que hacen planes engañosos;

No permitan que nadie los engañe y les arrebate el premio insistiéndoles en autocastigarse, o en la adoración de ángeles. Ellos creen que son mejores que otros por visiones que dicen que han tenido, y se han vuelto ridículamente pretensiosos en sus mentes pecaminosas.

porque sus mentes van errantes, y son inestables en todo lo que hacen.

Se jactan de sí mismos con alardes sin sentido, incitan a los deseos sexuales pervertidos, y así atraen a la inmoralidad a los que apenas acaban de escapar de una vida de error.

Pues con avaricia los explotarán a ustedes con historias falsas. Sin embargo, ellos ya están condenados: su sentencia ha estado colgando de sus cuerpos hace mucho tiempo, y su destrucción no tardará.

Él habló sobre estas cosas, aunque algunas de las que escribió son difíciles de entender. Algunas personas ignorantes y desequilibradas han tergiversado lo que él escribió según su conveniencia, como lo hacen con otros escritos.

Porque todas las cosas de este mundo, nuestros deseos pecaminosos, nuestro deseo por todo lo que vemos, nuestra jactancia por lo que hemos logrado en la vida, ninguna de esas cosas viene del Padre, sino del mundo.

¡Cuán grande problema tienen! Pues han seguido el camino de Caín. Así como Balaam y su engaño, ellos se han dejado llevar por el afán de lucro. Como la rebelión de Coré, se han destruido a sí mismos.

Y el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama Diablo y Satanás, y que engaña a todo el mundo, fue lanzado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él.




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