Salomón tenía cuatro mil establos para caballos y carros, y doce mil jinetes. Los mantuvo en las ciudades de los carros, y también con él en Jerusalén.
Salomón construyó un ejército de carros y caballos. Tenía 1.400 carros y 12.000 caballos, que colocó en las ciudades de los carros, y también con él en Jerusalén.
Tu rey no debe tener grandes cantidades de caballos, ni enviar a sus hombres a Egipto para comprar más caballos, porque el Señor ha declarado: “No debes volver allí nunca más”.