El rey tenía una flota de barcos de Tarsis tripulada por los marineros de Hiram. Una vez cada tres años los barcos de Tarsis llegaban con un cargamento de oro, plata, marfil, monos y pavos reales.
Envíame también madera de cedro, de ciprés y de algum del Líbano, porque sé que tus obreros son hábiles para cortar los árboles del Líbano. Enviaré hombres para que ayuden a tus trabajadores
Hiram le envió barcos al mando de sus propios oficiales, junto con marineros experimentados. Fueron con los hombres de Salomón a Ofir, donde cargaron 450 talentos de oro, que luego llevaron al rey Salomón.
El rey utilizó la madera de algum para hacer escalones para el Templo y para el palacio real, y en liras y arpas para los músicos. Nunca se había visto nada igual en el país de Judá).
Presentó al rey ciento veinte talentos de oro, enormes cantidades de especias y piedras preciosas. Nunca antes había habido especias como las que la reina de Saba regaló al rey Salomón.