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Referencias Cruzadas

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2 Crónicas 17:5

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Así, el Señor aseguró el dominio del reino de Josafat, y todo el pueblo de Judá le pagó sus cuotas. Como resultado, llegó a ser muy rico y honrado.

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24 Referencias Cruzadas  

Abrán era muy rico, y tenía muchas manadas de ganado y mucha plata y oro.

Año tras año, todos los visitantes traían regalos: objetos de plata y oro, ropa, armas, especias, caballos y mulas.

El rey hizo que en Jerusalén abundara la plata como las piedras, y la madera de cedro como los sicómoros en las estribaciones.

Salomón dominaba todos los reinos desde el río Éufrates hasta el país de los filisteos, hasta la frontera de Egipto. Presentaron tributo a Salomón y le sirvieron durante su vida.

El rey hizo que en Jerusalén abundaran la plata y el oro como las piedras, y la madera de cedro como los sicómoros en las estribaciones.

Josafat era muy rico y honrado, e hizo una alianza matrimonial con Acab.

Desde entonces fue muy respetado por todas las naciones, y muchos trajeron a Jerusalén ofrendas para el Señor y regalos valiosos para Ezequías, rey de Judá.

El rey hizo que en Jerusalén abundara la plata como las piedras, y la madera de cedro como los sicómoros en las estribaciones.

El Señor bendijo la última parte de la vida de Job más que la primera. Ahora era dueño de 14.000 ovejas, 6.000 camellos, 1.000 yuntas de bueyes y 1.000 asnas.

Si el Señor no es el que construye la casa, es inútil el trabajo de los albañiles. Si el Señor no guarda la ciudad, el trabajo de los guardias no tiene sentido.

Si tus hijos siguen mis leyes y los acuerdos que les enseñe, también sus descendientes se sentarán en el trono para siempre”.

Los reyes te rinden tributo por tu Templo en Jerusalén.

Los reyes de Tarsis y las islas le traerán tributos; y los reyes de Saba y Seba vendrán con regalos.

Haz promesas a Dios y asegúrate de cumplirlas. Todos rinden tributo al Temible.

Que el rey actúe con maldad es terrible, pues su trono le ha sido dado por hacer lo recto.

Entraron a la casa y vieron al niño con María, su madre. Se arrodillaron y lo adoraron. Entonces abrieron sus bolsas de tesoros y le obsequiaron regalos de oro, incienso y mirra.

Busquen su reino en primer lugar, y su senda de justicia, y todo se les dará.

Pero después de que hayan sufrido un poco, el Dios de toda gracia, que los llamó a su gloria eterna en Cristo, él mismo los restaurará, los sostendrá, los fortalecerá y les dará un fundamento sólido.

Pero algunos hombres odiosos preguntaron: “¿Cómo podría salvarnos este hombre?” . Lo odiaron y no le trajeron ningún regalo; pero Saúl no tomó represalias.




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