El rey Ben-hadad hizo lo que Asa le había pedido, y envió a sus ejércitos y a sus comandantes a atacar las ciudades de Israel. Conquistaron Ijón, Dan, Abel-maim y todas las ciudades almacén de Neftalí.
Entonces el rey Asa fue con todos los hombres de Judá, y se llevaron de Rama las piedras y los maderos que Baasa había usado para construir, y con ellos edificó Geba y Mizpa.