En el año treinta y seis del reinado de Asa, Baasa, rey de Israel, invadió Judá. Fortificó Ramá para impedir que nadie viniera o fuera a Asa, rey de Judá.
Porque el Señor busca por toda la tierra la oportunidad de mostrar su poder a favor de los que le son total y sinceramente devotos. Tú has actuado de forma estúpida al hacer esto. Así que de ahora en adelante siempre estarás en guerra”.