Pero Jeroboam había enviado tropas para atacar por la retaguardia, de modo que mientras él y la fuerza principal estaban al frente de Judá, la emboscada estaba detrás de ellos.
En cuanto empezaron a cantar y a alabar, el Señor tendió una emboscada a los hombres de Amón, Moab y el monte Seír que venían a atacar a Judá, y fueron derrotados.
Josué los envió, y fueron a tender una emboscada entre Betel y el lado occidental de Hai. Pero esa noche Josué se quedó con el pueblo en el campamento.