Antes de que las montañas nacieran, antes de que trajeras al mundo la tierra y el universo, desde la eternidad pasada, hasta la eternidad futura, haz sido Dios.
Esto es lo que dice el que está por encima de todo, el que vive en la eternidad, cuyo nombre es santo: Yo vivo en un lugar alto y santo, junto a los que se arrepienten y actúan con humildad, restaurando sus espíritus y animándolos.
Jesús respondió: “He estado con ustedes por tanto tiempo, Felipe, ¿y sin embargo aún no me conoces? Todo el que me ha visto a mí ha visto al Padre. ¿Cómo puedes decir ‘muéstranos al Padre’?
Todo lo que es bueno, todo don perfecto, viene de arriba, y desciende del Padre que hizo las luces del cielo. A diferencia de ellas, él no cambia, él no varía ni arroja sombras.
al único Dios, nuestro Salvador, por medio de Jesucristo nuestro Señor, sea la gloria, la majestad, el poder y la autoridad, desde siempre, ahora, y para siempre. Amén.
Escuché una voz fuerte que salía del trono y decía: “Ahora la casa de Dios está con los seres humanos y él vivirá con ellos. Ellos serán su pueblo. Dios mismo estará con ellos como su Dios.
Y no habrá más noche, y no habrá necesidad de luz de una lámpara, o de la luz del sol, porque el Señor Dios les dará la luz. Y reinarán por siempre y para siempre.