Pues la responsabilidad cristiana de los hijos o nietos de una viuda es cumplir con las obligaciones que exige su familia, y pagar a sus padres ayudándolos. Esto es lo que agrada a Dios.
Toda mujer cristiana que tenga viudas en la familia debe ayudarlas, para que la iglesia no reciba la carga de tal responsabilidad y pueda ayudar a las viudas que realmente están en necesidad.
Poco después, Rut la moabita le dijo a Noemí: “Por favor, déjame ir a los campos a recoger el grano que ha quedado, si encuentro a alguien que me dé permiso”. “Sí, adelante, hija mía”, respondió Noemí.