“Rubén: Tú eres mi primogénito, concebido cuando era fuerte, nacido cuando era vigoroso. Estuviste por encima de todos los demás en posición y en poder.
Han venido a la iglesia de los primogénitos cuyos nombres están escritos en el cielo; a Dios, el juez de todos, y donde están las personas buenas, cuyas vidas están completas.
Entonces los hombres de Zif fueron a ver a Saúl a Guibeá y le dijeron: “David se esconde en nuestra zona, en las fortalezas de Hores, en la colina de Haquila, en los páramos del sur.