Los hijos que le nacieron a Cetura, la concubina de Abrahán. Ella dio a luz a: Zimrán, Jocsán, Medán, Madián, Isbac y Súah. Los hijos de Jocsán: Sabá y Dedán.
Así que cuando los ismaelitas (que eran comerciantes de Madián) llegaron, sacaron a José de la fosa y se lo vendieron por veinte piezas de plata. Los ismaelitas lo llevaron a Egipto.
Largas caravanas de camellos cubrirán la tierra, camellos jóvenes de Madián y Efá. Todo el pueblo de Sabá vendrá a ti cargando oro e incienso, gritando alabanzas al Señor.
¡Vuelvan y huyan! Busquen un lugar donde esconderse, pueblo de Dedán, porque voy a hacer caer el desastre sobre ustedes, descendientes de Esaú, cuando los castigue.
por eso el Señor Dios dice: Voy a llegar a atacar a Edom y a destruir a toda su gente y sus animales. La convertiré en un páramo. Desde Temán, en el norte, hasta Dedán, en el sur, morirán a espada.
En ese momento un hombre israelita llevó a una mujer madianita a la tienda de su familia a la vista de Moisés y de todos los israelitas mientras lloraban a la entrada del Tabernáculo de Reunión.