Cuando estuve allá con ustedes y necesité algo, no fui carga para nadie, porque los creyentes que venían de Macedonia se hicieron cargo de mis necesidades. Estuve decidido a no ser carga para ustedes y nunca lo seré.
Habría preferido que se quedara aquí conmigo para que me fuera de ayuda como me habrías ayudado tú mientras estoy encadenado por predicar la buena noticia.