1 Corintios 15:47

Versión Biblia Libre

El primer hombre vino del polvo de la tierra; el segundo vino del cielo.

Referencias Cruzadas

Génesis 2:7

Entonces el Señor formó al hombre Adán con polvo de la tierra. Y sopló en sus fosas nasales el aliento de vida, y Adán se convirtió en un ser vivo.

Génesis 3:19

Tendrás que sudar para cultivar suficiente comida hasta que mueras y regreses a la tierra. Porque fuiste hecho del polvo de la tierra, y al mismo polvo regresarás”.

Isaías 9:6

Porque nos nacerá un niño, se nos dará un hijo. Él llevará la responsabilidad de gobernar. Se llamará Consejero maravilloso, Dios poderoso, Padre eterno, Príncipe de la paz.

Jeremías 23:6

Cuando sea rey, Judá se salvará e Israel vivirá en seguridad. Este es el nombre que recibirá: El Señor que nos hace justos.

Mateo 1:23

“Una virgen quedará embarazada y tendrá un hijo. Y le llamarán Emanuel”, que significa “Dios con nosotros”.

Lucas 2:11

El Salvador ha nacido hoy, aquí en la ciudad de David. Él es el Mesías, el Señor.

Juan 3:31

El que viene de arriba es más grande que todos; el que viene de la tierra pertenece a la tierra y habla cosas terrenales. El que viene del cielo es más grande que todos.

Juan 6:33

Porque el pan de Dios es el que viene del cielo y el que da vida al mundo”.

Hechos 10:36

Ustedes conocen el mensaje que Dios envió a Israel, compartiendo la buena noticia de paz que viene de Jesucristo, quien es Señor de todos.

1 Corintios 15:45

Como dice la Escritura: “El primer hombre, Adán, se convirtió en un ser vivo;” pero el último Adán, en un espíritu que da vida.

1 Corintios 15:46

El Adán espiritual no vino primero, sino el natural. El Adán espiritual vino después.

2 Corintios 5:1

Sabemos que cuando esta “tienda de campaña” terrenal en la que vivimos sea derribada, tenemos una casa preparada por Dios, no hecha por manos humanas. Es eterna, y está en el cielo.

1 Timoteo 3:16

No hay duda alguna sobre ello: la verdad revelada sobre Dios es asombrosa. Él se nos fue dado a conocer en forma humana, fue vindicado por el Espíritu, visto por ángeles, declarado a las naciones, creído por el mundo, y recibido en gloria.