Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas
- Anuncios -




1 Corintios 11:32

Versión Biblia Libre

Pero cuando somos juzgados, estamos siendo disciplinados por el Señor, a fin de que no seamos condenados junto con el mundo.

Ver Capítulo Copiar

22 Referencias Cruzadas  

Yo seré un padre para él, y él será un hijo para mí. Si hace el mal, lo disciplinaré con la vara como se hace con la gente, como un padre que castiga a un hijo.

Aunque el Señor me castigue duramente, no me dejará.

¿Quieren ser castigados? ¿Van a seguir en rebelión? Su mente está dañada por completo, y su corazón está totalmente enfermo.

Así que tienes que decirles: “Esta es la nación que se negó a escuchar lo que dijo el Señor, su Dios, y no quiso aceptar la disciplina del Señor. La verdad se ha extinguido; la gente ni siquiera habla de ella.

Tú no prestas atención a nadie ni aceptas la corrección; no confías en el Señor, ni pides su ayuda.

Está claro que todo lo que dice la ley se aplica a aquellos que viven bajo la ley, para que nadie pueda tener excusa alguna, y para asegurar que todos en el mundo sean responsables ante Dios.

El resultado de este don no es como el resultado del pecado. El resultado del pecado de Adán fue juicio y condenación, pero este don nos justifica con Dios, a pesar de nuestros muchos pecados.

¿Qué decir entonces de los sabios, de los escritores, de los filósofos de esta era?

¿Acaso Dios ha convertido la sabiduría de este mundo en necedad? Puesto que Dios en su sabiduría no permitió que el mundo lo conociera por medio de su propia sabiduría, sino que su plan de gracia fue que por la necedad de la buena noticia fueran salvados los que creyeran en él.

Esa es la razón por la que muchos de ustedes están débiles y enfermos, e incluso algunos han muerto.

Sin embargo, si realmente nos examinamos nosotros mismos, no seríamos juzgados de esta manera.

Así que, mis hermanos y hermanas, cuando se reúnan a comer la Cena del Señor, espérense unos a otros.

Así que debes darte cuenta de que así como un padre disciplina a su hijo, el Señor tu Dios te disciplina a ti.

Himeneo y Alexander son ejemplo de ello, y yo los he “entregado a Satanás” para que aprendan a no dar una mala imagen de Dios.

Pues sabemos que pertenecemos a Dios, y que el mundo está bajo control del maligno.

“Yo corrijo y disciplino a los que amo. Así que sé sincero y arrepiéntete.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos