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Referencias Cruzadas

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Mateo 9:13

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Pero vayan y aprendan qué significa esto: “Lo que pido de ustedes es misericordia y no sacrificios”. Pues no he venido a llamar a justos, sino a pecadores.

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39 Referencias Cruzadas  

Al oír esto, Jesús les contestó: ―No son los sanos los que necesitan médico, sino los enfermos. Y yo no he venido a llamar a justos, sino a pecadores.

Porque el Hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.

No he venido a llamar a justos, sino a pecadores para que se arrepientan.

Si ustedes supieran qué significa esto: “Lo que pido de ustedes es misericordia y no sacrificios”, no condenarían a los que no son culpables.

El Señor no tarda en cumplir su promesa, como algunos piensan. Más bien, él tiene paciencia con ustedes, porque no quiere que nadie muera sin haberse arrepentido.

Por tanto, arrepiéntanse y vuélvanse a Dios, para que sean borrados sus pecados. Así vendrán tiempos de descanso de parte del Señor.

Al oír esto, se calmaron y alabaron a Dios diciendo: ―¡Así que también a los no judíos Dios les ha dado oportunidad de arrepentirse y tener vida eterna!

Decía: «Arrepiéntanse, porque el reino de los cielos está cerca».

Por su poder, Dios lo exaltó como Príncipe y Salvador, para que diera a Israel arrepentimiento y perdón de pecados.

En su nombre se predicarán el arrepentimiento y el perdón de pecados a todas las naciones, comenzando por Jerusalén.

Desde entonces comenzó Jesús a predicar: «Arrepiéntanse, porque el reino de los cielos está cerca».

―Arrepiéntase y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados —les contestó Pedro—. Entonces recibirán el don del Espíritu Santo.

Den muestras de verdadero arrepentimiento.

A judíos y a griegos les he dicho que se arrepientan ante Dios y que crean en nuestro Señor Jesús.

Les dijo Jesús: ―¿No han leído nunca en las Escrituras: »“La piedra que desecharon los constructores ha llegado a ser la piedra principal. Esto es obra del Señor, y nos deja maravillados”?

Él les contestó: ―¿No han leído lo que hizo David en aquella ocasión en que él y sus compañeros tuvieron hambre?

Pero, en cuanto a que los muertos resucitan, ¿no han leído en el libro de Moisés, en el pasaje sobre la zarza, cómo Dios le dijo: “Yo soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob”?

―¿Y acaso —respondió Jesús— no está escrito en su Ley: “Yo les he dicho: ‘Ustedes son dioses’ ”?

―¿No han leído —respondió Jesús— que en el principio el Creador “los hizo hombre y mujer”

¿O no han leído en la Ley que los sacerdotes trabajan en el Templo el sábado sin que se les culpe de nada?

Jesús respondió: ―¿Qué está escrito en la Ley? ¿Cómo la interpretas tú?

Amarlo con todo el corazón, con todo el entendimiento y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, es más importante que todas las ofrendas quemadas y los sacrificios.

―No son los sanos los que necesitan médico, sino los enfermos —les contestó Jesús—.




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